Era el partido 2.000 de Gregg Popovich al frente de los Spurs. Ningún entrenador ha hecho algo igual dirigiendo a un solo equipo. Y el marco para la celebración no podía ser mejor: el TD Garden. En ese marco lo celebraron los Spurs ganando a los Celtics.
Partido de atarse los machos. Defensas, sí. Permisividad arbitral, también. Apenas 25 faltas pitadas en todo el partido. Solo 14 libres ejecutados en toda la noche. Mucha igualdad. Extrema. Y notable desacierto en la resolución del juego.
En los 3 minutos finales del partido... 2-2 como resultado. No es para tirar cohetes. El día en el que Boston recuperaba a Jayson Tatum. La jornada en la que San Antonio recuperaba a Dejounte Murray. El segundo fue mejor que el primero. Y más importante. Por mucho que les pese a sus detractores, Murray es un jugador clave en estos Spurs. Y lo volvió a demostrar. Está haciendo una gran temporada.
El colmo del despropósito fue la jugada final. Acorde al modo gris en el que se movió el desenlace del juego. Con 5,7 segundos por jugar y 97-99 en el marcador sacaba Spurs de banda. El primer intento de Derrick White acabó en petición de tiempo muerto. Muy muy al límite de los 5 segundos (si no rebasados). El segundo le correspondió al australiano Landale. También al borde de los 5 segundos. Decidió el pívot soltar el balón que ya le quemaba en las manos. Y se lo entregó directamente y de un modo bien inocente a Jaylen Brown. Este salió corriendo hacia el aro rival. Pero su entrada no acabó en canasta. Por muy poco. El partido hubiera ido a la prórroga. No fue así. Y respiraron los Spurs.
San Antonio había sufrido 4 derrotas seguidas. Pero con Murray es otro equipo. El base sumó 22 puntos, 12 asistencias y 9 rebotes. Derrick White y Devin Vassell anotaron 17 por cabeza. Con Vassell siendo titular. Keldon Johnson metió 13 y Jakob Poeltl capturó 14 rebotes. Y los texanos fueron capaces de ganar perdiendo el doble de balones que los locales.
Los Celtics de Udoka siguen sin funcionar. Ni siquiera salir con su cinco de gala les sirvió. Jaylen Brown volvió a ser su mejor hombre en ataque con 30 puntos. Y el regreso de Tatum no fue demasiado feliz. Anotó 19. Pero con 6 de 20 en el tiro.
Dennis Schröder hizo 15 puntos. Marcus Smart sumó 14. Y el dominicano Al Horford se quedó en 4 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias en 27 minutos.
El 18-20 delata a Boston. El equipo precisa algo distinto. Con lo que tiene ahora mismo no parece darle para gran cosa. El tiempo de Udoka sigue corriendo.