Los rivales de Brooklyn Nets han de estar preocupados. El equipo lleva un mes y medio sin Kevin Durant y no para de ganar. Hoy, con el citado Durant, James Harden y Blake Griffin vestidos de calle en la banda, paseo militar ante Charlotte Hornets.
Fue un partido ganado por la vía rápida. Brooklyn arrasó a su rival en el primer cuarto al ganar 32-11, y aquí paz y después gloria. Los Nets no defienden... pero dejan al rival en 11 puntos en el primer cuarto y en 89 al final del partido. Los Nets solo viven de sus estrellas... pero ganan por paliza a su rival con Kyrie Irving como tercer anotador de un equipo sin Harden y Durant. Los Nets fichan a un jugador en retroceso... pero LaMarcus Aldridge, aún en retroceso, puede aportar a este equipo, como ya ha empezado a hacer hoy.
Aldridge ha debutado con los Nets. Titularidad y 30 minutos de juego. Sus números: 11 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias. Se le ha visto cómodo en la pista. No es el Aldridge que fue 7 veces All-Star, pero tampoco es un exjugador. Nada más lejos de la realidad que considerar a Aldridge como un estorbo.
El primer cuarto ha resultado demoledor y definitivo. Tremendo ese 32-11. ¡Charlotte ha terminado el cuarto con 4 de 23 en el tiro de campo y 1 de 10 desde el triple! Eso habla de que más allá de la buena defensa local, los Hornets han vivido una auténtica pesadilla en el tiro en los primeros 12 minutos, 12 minutos ciertamente desastrosos.
En ese primer cuarto la estrella ha sido Jeff Green, autor ya por entonces de 12 puntos y 5 rebotes. Brooklyn iba como la seda, Tyler Johnson era su segundo anotador y el equipo de Nash solo había perdido un balón. La plantilla del equipo neoyorquino tiene fondo de armario, es bastante más profunda de los que algunos quieren ver.
En los inicios del segundo cuarto... ¡47-18 en el marcador! Sin llegar al ecuador del segundo acto los Nets ya ganaban por 29 puntos. Todo lo demás, el resto del partido, ha resultado intrascendente, con Brooklyn no queriendo hacer demasiada sangre al final del partido tras adquirir una ventaja de 32 puntos cuando se jugaba el tercer cuarto.
Al final, 111-89. La línea de juego del equipo de Nash-D'Antoni empieza a ser reveladora. Acumulan ya estos Nets 20 victorias en sus últimos 23 partidos y llevan ya 7 triunfos consecutivos como locales. Todo para sumar 34 victorias y 15 derrotas y para conservar con esa marca el liderato del Este al que accedieron la noche anterior.
Jeff Green acabó con 21 puntos, 8 rebotes y 5 triples y Landry Shamet volvió de su leve lesión de tobillo anotando 17 puntos y 5 triples en 21 minutos. También 5 triples para 15 puntos en 22 minutos de Tyler Johnson. Porque la línea de 3 ha sido un arma de destrucción masiva en manos de Brooklyn, que ha metido 20 triples en el encuentro.
El equipo local no ha precisado de otra exhibición de Irving. El All-Star ha sumado 15 puntos, 11 rebotes y 8 asistencias. Ha visto bien claro que este partido no necesitaba una entrega absoluta por su parte.
Además, buen partido de Bruce Brown en unos Nets que se permiten dejar sin un solo segundo de juego a DeAndre Jordan, una vez Aldridge ha ocupado el puesto de pívot titular y el joven Nic Claxton le ha cubierto la espalda.
Los Hornets, empezando a acostumbrarse a no tener a LaMelo Ball, no han encontrado a nadie en sus filas que pudiera romper la atonía colectiva en el ataque. De hecho, los máximos anotadores visitantes ante Nets, Gordon Hayward y Devonte' Graham, solo han hecho 13 puntos. Pobre la imagen dada hoy por la escuadra de James Borrego.