Sin Stephen Curry, los Warriors quisieron marcar territorio desde el primer instante y lo consiguieron. Victoria por 20 puntos (37-17) en el primer cuarto, un parcial que fijó el escenario en el que se movió la acción dominada por Klay Thompson y Draymond Green.
Un dato de ese primer cuarto resultó especialmente esclarecedor: Klay Thompson metió más puntos (18) que todo el equipo de Portland (17). Pero hubo más cifras significativas en el arranque del partido. Por ejemplo, en el primer acto los locales anotaron el 60% de sus tiros y los visitantes el 23,8%. Además, 17 rebotes a 7, 10 asistencias a 4... todo muy desequilibrado.
Luego, llegó el descanso con un 65-51 a favor de los Warriors, en los que Thompson y Green seguían marcando la pauta. En el intermedio, una estadística a tener en cuenta: ¡entre Damian Lillard y C.J. McCollum llevaban 3 de 19 en el tiro de campo! El inicio de Lillard volvió a ser desesperadamente lento.
Ya en el tercer cuarto, Portland fue incapaz de poner en apuros a los locales, que terminaron el período 20 arriba. Para entonces, Thompson ya había alcanzado los 30 y Green ya rozaba el triple-doble que luego lograría. Y el local Anderson Varejao y el visitante Gerald Henderson habían sido expulsados.
Triples y triples-dobles
A pesar de la relajación final, no hubo mucha historia. Triunfo local por 118 a 106 con 37 puntos y 7 rriples de Klay Thompson -primer jugador en la NBA que anota al menos 7 triples en 3 juegos consecutivos de playoff- y triple-doble de Draymond Green con 23 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias, a lo que añadió 3 tapones.
Tras ellos, los dobles dobles de Andrew Bogut y Harrison Barnes y la capacidad local para ganar con total facilidad, con una naturalidad insultante.
En los perdedores, 30 puntos y 4 robos de Lillard y 15 puntos de Al Farouq Aminu y Allen Crabbe. Luis Montero jugó un tiempo testimonial y anotó 2 puntos.