Poca historia en el primer partido de las Finales del Este. Cleveland estaba descansando desde el 8 de mayo y llegó al estreno ante Toronto como un terremoto que arrancó de cuajo los cimientos del equipo canadiense. Paliza, y de las grandes.
Cleveland ganó el primer partido de la serie 115-84, la mayor diferencia de puntos conseguida por la franquicia en su historia en un partido de playoffs. Un triunfo sin despeinarse en el que dos jugadores ejercieron de apisonadoras: Kyrie Irving y LeBron James.
Esta vez, los Cavaliers ni siquiera tuvieron que echar mano del lanzamiento triple con el que destrozaron a Atlanta. Todo fue mucho más fácil. El segundo cuarto (33-16) supuso la ruptura definitiva del partido, ya que los Cavs se plantaron en el descanso ganando 66-44 tras meter el 67% de sus tiros de campo. A partir de ahí, todo sobró.
Los locales terminaron ganando por 31 puntos tras dominar a su antojo el rebote (45-23) y anotar el 55% de sus lanzamientos en juego. Kyrie Irving se fue a 27 puntos y LeBron James, que anotó sus primeros 9 tiros, firmó 24. Entre ambos jugadores... ¡22 de 30 en el tiro de campo! Una salvajada.
Kevin Love se quedó esta vez en 14 puntos, Richard Jefferson hizo buenos números y cada jugador participó de la victoria interpretando el rol que quiere Tyronn Lue. Todo para seguir invictos: 9-0 en estos playoffs.
Unos Raptors decepcionantes
Frente a la perfección local, la imperfección visitante. Una imperfección que se deslizó hacia la incompetencia. Toronto defendió mal, no tuvo ataque, jugó sin referencias y pareció tener las piernas pesadas, algo lógico teniendo en cuenta los esfuerzos pasados y el menor descanso del que ha gozado.
El resultado fue un desastre para los canadienses, donde solo DeMar DeRozan (18 puntos), y a medias, logró un nivel aceptable. El equipo jugó sin Jonas Valanciunas, Kyle Lowry estuvo horrible (8 puntos y 0 de 7 en el triple), siendo dominado por Irving, y DeMarre Carroll anduvo en una esfera lejana a su juego habitual.
Esta vez jugó Luis Scola, y no fue, ni mucho menos, de los peores. El argentino firmó 7 puntos y 2 rebotes en 14 minutos anotando un triple.