Jaylen Brown se quitó la máscara en un tiempo muerto y a partir de ahí elevó su juego como si se hubiera liberado de una muy pesada carga que ha tenido que sobrellevar como ha podido en los últimos dos meses.
Fue la imagen del cuarto partido entre Hawks y Celtics, una serie que no parece dar mucho más de sí.
Brown se hartó de su máscara protectora en el segundo cuarto. Hasta ese momento llevaba un 1 de 7 en el tiro de campo. Pues bien, a partir de liberar su rostro se liberó su juego hasta firmar 11 de 15 en el tiro y terminar con 31 puntos.
Se quitó la máscara Brown y desenmascaró en parte la verdad de estos Hawks, que no es otra que no les llega para enfrentar esta eliminatoria. Boston es mucho Boston para Atlanta.
Los Jays sumaron 62 puntos en el triunfo de su equipo, 121-129, y Boston ya está a un paso de medirse en semifinales de conferencia a los Sixers. El marcador ahora está 3-1 y la eliminatoria viaja al TD Garden.
Jayson Tatum terminó el partido con 31 puntos, 7 rebotes y 3 tapones, un partido que se prolongó más de la cuenta en su último minuto. Se veía a la legua que Atlanta no tenía discurso deportivo para pelearle el final a Boston, pero se empeñaron algunos de sus jugadores en hacer números y por tirar a canasta tiraron incluso cuando ya se podrían haber guardado la bola para no prolongar su agonía.
Celtics tuvo a muchos jugadores participando en el triunfo. Marcus Smart firmó 19 puntos, Derrick White hizo 18, Malcolm Brogdon se fue a 14 en 23 minutos y cuidado que viene Robert Williams III, que por fin dio la talla con 13 puntos y 15 rebotes.
El dominicano Al Horford no anotó en 34 minutos de juego. Solo lanzó 2 veces a canasta, pero su trabajo sordo se escuchó muy bien. Defensa, bloqueos, juego solidario, 11 rebotes, 5 asistencias y el mejor balance colectivo del equipo, un +17, en el tiempo que él estuvo en cancha.
Boston controló el juego, aunque en su debe hay que decir que encajó 68 puntos en la segunda mitad, una cifra alejada, muy alejada, de los cánones que se piden para ser competitivo en postemporada, aunque hoy resultara suficiente.
Trae Young fue el más activo jugador local con 35 puntos y 15 asistencias con solo 1 pérdida de balón, y 11 de 26 en el disparo a cesta. De'Andre Hunter rubricó 27 puntos y 7 rebotes y Dejounte Murray se marchó hasta los 23 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias.
En el lado negativo de Atlanta, su nulo poder interior, el hecho de que Bogdan Bogdanovic solo pudiera jugar 19 minutos porque cometió 6 faltas muy rápidas y el nuevo fiasco de un jugador que es una sombra de sí mismo, John Collins.
Atlanta parece ya un equipo amortizado, sin tan siquiera un rayo de esperanza en su diario de postemporada.