Milwaukee Bucks sobrevivió a los 44 puntos de Jalen Brunson y fue capaz de remontar una desventaja de 17 puntos para imponerse 107-111 y mantenerse así en la tercera plaza de la Conferencia Este con registro global de 26-14.
El equipo de Mike Budenholzer perdía 70-53 jugándose el tercer cuarto, pero a partir de ahí se fue metiendo en el partido utilizando su acierto en el triple como piedra angular en esa recuperación en el marcador. ¡Hasta 12 triples anotaron los Bucks a partir de ese 70-53!
Fue la noche de Brunson, que se fue del partido con el sabor agridulce que da una actuación de All-Star acompañada de una derrota en casa.
Brunson hizo 44 puntos -récord personal en la NBA-, 7 rebotes, 4 asistencias y 15 de 30 en el lanzamiento de campo. Estaba claro que Brunson no podía seguir ocupando un espacio discreto, a pesar de sus buenos números, en el hábitat absorbente y casi infinito de Luka Doncic en Dallas. Este zurdo de inmensa calidad técnica estaba llamado a alcanzar un espacio propio, y ese espacio lo está logrando a partir de su hégira al Madison.
El partido llegó muy cerrado a su final. Olvídense del baloncesto del pasado, en el que uno medía el número de jugadas finales por las posesiones largas que pudiera hacer cada equipo. Ahora, en el último minuto de un partido puede haber dos mil tiros, trescientas faltas, cientos de despistes defensivos, un número impredecible de revisiones y hasta una alfombra voladora o un perro mastín luciendo palmito por mitad de la pista si en nombre del espectáculo fuera necesario.
Solo así se explica otro final de partido en la NBA, como tantos otros, donde en los últimos 50 segundos del encuentro el parcial fue de 8-11 para Milwaukee. Hubo de todo en ese tiempo. Acción celérica tras acción celérica, con ese ánimo tan del siglo XXI de que tienen que pasar muchas cosas en muy poco tiempo para que el personal no se aburra.
En ese final, protagonismo de Jalen Brunson, que se resistía a ceder un partido en el que su equipo había dominado y en el que estaba siendo visiblemente feliz, y de Jrue Holiday, que terminó el juego en las antípodas de cómo lo empezó.
Holiday empezó la noche de la peor manera posible, haciendo 3 faltas en los primeros 4 minutos y 28 segundos del partido. Y lo terminó con un gusto bien distinto: anotando 4 puntos decisivos.
Entre medias de esos 4 puntos de Holiday, Milwaukee hilvanó una jugada maravillosa bajo presión, un enlace de pases salvando la defensa local que tuvo su corolario en la asistencia de Giannis Antetokounmpo para el mate de Brook Lopez de espaldas al aro.
No le tembló el pulso como equipo a Bucks en un final tan cerrado. Los de Wisconsin supieron resolver la papeleta con una solvencia exquisita.
Se midieron en la pista dos equipos cuya forma de afrontar el juego resultó bien distinta.
Los locales tiraron de 3 hombres en ataque. Tal cual, sin más ayudas. Entre Brunson, Julius Randle e Immanuel Quickley metieron 92 de los 107 puntos de su equipo. Pero desde actuaciones bien divergentes.
La de Brunson ya está resumida: impresionante el base de Knicks. Quickley lo hizo muy bien con sus 23 puntos, pero los 25 puntos y 16 rebotes de Julius Randle no se pueden vender sin hacer hincapié en el esperpento que supuso su encono en tirar y tirar de 3 sin acierto alguno. Terminó el partido con 9 de 29 en el tiro de campo 'gracias' a un 1 de 12 desde el triple.
A Knicks no le salió a cuenta lanzar 100 veces a canasta durante el partido, ¡porque erró 62 de esos tiros! Y luego estuvo lo de sus suplentes. La segunda unidad neoyorquina no aportó nada.
Bucks tuvo problemas en controlar el rebote en su aro, pero su juego colectivo terminó imponiéndose. Nada que ver con New York. Hasta 7 jugadores visitantes en dobles dígitos anotadores.
Un Anteto discreto se fue a 22 puntos y 10 rebotes, Brook Lopez sumó 17 tantos, 7 rebotes y 3 tapones y Joe Ingles resultó capital desde la segunda unidad con su acierto desde el triple, metió 5, para terminar con 17 puntos y 5 asistencias.
Además, 15 puntos y 9 asistencias del crucial Holiday y 11 puntos y 11 rebotes de Pat Connaughton.
Milwaukee sigue ahí. Sigue ahí sin Khris Middleton y con un Jrue Holiday cuyo físico parece ir y venir. Sigue ahí al acecho, tras Celtics y Nets, aguardando su ocasión.