Sixers y Jazz estaban en sus segundos partidos de sendos back-to-back, pero a los primeros, que venían de jugar una prórroga con Charlotte, les pesó más que a los segundos, que procedían de un triunfo apabullante ante Minnesota.
Le pesaron las piernas a los Sixers en el segundo tiempo, y eso resulta letal ante un equipo como Utah, que defendió a gran nivel a partir del segundo cuarto para ganar de forma cómoda (96-118) y firmar su sexto triunfo consecutivo, los 3 últimos como visitante.
Utah sigue cómodo en la tercera plaza del Oeste con 18-7, sin hacer mucho ruido y sin que se le preste demasiada atención, pero es a todas luces un equipo muy equipo, una escuadra con una plantilla larga y completa.
Hoy tocaron hombres altos. Rudy Gobert y Hassan Whiteside fueron mucho más que Joel Embiid y Andre Drummond, con el francés reivindicando su importancia en la pista pocas horas después de que Anthony Edwards y Patrick Beverley, dos jugadores que cada vez que hablan sube el pan, menospreciaran el poder defensivo del francés.
Gobert sumó 17 puntos y 21 rebotes en 29 minutos y Whiteside hizo 14 puntos y 10 rebotes en 15, siendo los líderes de un dominio apabullante del equipo visitante en el rebote.
A Sixers le pesó su parón ofensivo en la segunda mitad (42-57), su inferioridad en los tableros y su horrible noche desde el triple, acabando con una serie de 6 de 33 desde más allá del arco.
Y aún pudo ser peor la noche para Philadelphia, visto el golpetazo que se dio en la cabeza Tyrese Maxey mediado el segundo cuarto. Susto de los grandes que afortunadamente quedó en nada.
Utah tuvo a 8 jugadores en dobles dígitos anotadores (¡4 de ellos suplentes!). Su segunda unidad resultó crucial, como fue importante entre los titulares Donovan Mitchell, que terminó con 22 puntos, 6 asistencias y 5 triples, brillando especialmente en la primera parte.
El equipo local fue perdiendo fuelle según fue avanzando el partido. Embiid tuvo un partido más bien gris (19 puntos y 9 rebotes), yendo solamente 2 veces a los tiros libres y metiendo solo 6 puntos tras el descanso. Seth Curry sumó 18 puntos y Tobias Harris, 17 más 7 rebotes.
Maxey volvió al juego tras su susto y terminó con 11 puntos en 26 minutos.
En el lado más negativo, el nulo partido de Danny Green, la desastrosa noche de Drummond y el impreciso ataque de Shake Milton y Furkan Korkmaz.
Sixers queda con marca de 14-12, luchando con Cleveland por la sexta posición del Este, la última que da paso directo a los playoffs.