El inicio del juego marcó el partido. RJ Barrett hizo dos faltas seguidas a Aaron Gordon y Nerlens Noel hizo otra a Nikola Jokic. Solo habían transcurrido 13 segundos entre las tres faltas y 22 segundos de partido. Y a Tom Thibodeau le cayó una técnica a los 28 segundos de juego.
Con ese estrambótico inicio los Knicks cavaron su tumba. En esos 28 segundos el marcador estaba 0-0; a partir de ahí, la debacle visitante y la sideral exhibición del, hoy por hoy, máximo aspirante al cetro de MVP, Nikola Jokic.
Vendaval de juego de Denver en el primer cuarto ante unos Knicks desnortados. Tiempo muerto de Thibodeau consumidos solo 3 minutos y 17 segundos de juego con 9-2 en el marcador, un parón que no sirvió para nada, porque Nuggets (o mejor dicho, Jokic) continuó como un martillo pilón socavando todas las esencias del juego que ha llevado a los neoyorquinos tan arriba en la tabla.
La ventaja creció y creció. Un mate de Michael Porter Jr. puso el 26-6 a 3:25 del final del cuarto y el primer acto finalizó con un esclarecedor 34-12.
¡De los 34 puntos de Denver, 24 de Nikola Jokic! El serbio acabó el primer cuarto con 24 puntos, 6 rebotes y 2 tapones, sin apenas tener fallos en el tiro y con... ¡4 mates en 12 minutos, algo inusual en él! Desbocado el pívot local, cuyo rendimiento espectacular contrastó con la nula presencia en el juego de la gran estrella visitante, Julius Randle, en el primer cuarto, del que se fue con 0 de 4 en el tiro y un punto anotado.
Denver logró ese 34-12 sin anotar un solo triple, yendo 12 veces a la línea de libres y perdiendo solo 2 balones; Knicks presentó, mientras, un más que preocupante 4 de 24 en el tiro de campo en los primeros 12 minutos de juego.
Ese arranque de encuentro fue la clave del partido, porque a partir de ahí los Nuggets nunca soltaron a su presa, dominando el marcador hasta el final y llegando a tener una máxima ventaja de 31 puntos (108-77) cuando se jugaba ya el último cuarto, para terminar con un holgado 113-97.
El pequeño gran milagro de estos Nuggets seguía en curso. Desde que se lesionó Jamal Murray el 12 de abril el equipo acumula una marca de 10-2, y hoy ha ganado con total facilidad a los Knicks sin contar con el citado Murray, P.J. Dozier, Monte Morris y Will Barton.
Lo ha hecho con Nikola Jokic al frente (32 puntos, 12 rebotes y 6 asistencias sin jugar el cuarto final) y con dos lugartenientes de lujo, jugadores exteriores en un equipo con la enfermería atiborrada de exteriores, lo que demuestra la profundidad de plantilla de este equipo. Grandes partidos de Austin Rivers y Facundo Campazzo.
El jugador argentino sigue en un momento dulce de juego, en pleno idilio con la NBA. Las bajas de su equipo le han obligado a asumir responsabilidades que no estaban previstas tan pronto, y a él se le ve encantado. Titular, 33 minutos, juego desatado y maduro, un equilibrio complejo siempre, y numerazos: 16 puntos, 9 rebotes, 4 asistencias, 5 robos (por segundo partido consecutivo) y solo una pérdida de balón. Gran nivel en ataque y en defensa del jugador cordobés.
Mientras, Austin Rivers reivindicó su figura ante el equipo en el que no tuvo minutos esta misma temporada, ante la escuadra de la que salió con más pena que gloria. Rivers está rindiendo muy bien desde que llegó a Denver, pero hoy se ha salido: 25 puntos, 3 asistencias, 3 robos y 6 triples de 9 intentos. Se le vio hipermotivado y hasta tuvo algún que otro pique con sus excompañeros.
Michael Porter Jr. no ha brillado excesivamente, aunque se ha ido del partido con 17 puntos.
Denver ha trabajado muy bien en defensa y se le ha visto sobrado en todo momento, ganando con facilidad a pesar de tener a Aaron Gordon sin anotar en todo el partido (0 de 6 en el tiro), a Paul Millsap con 3 de 13 en el lanzamiento y a JaMychal Green con 1 de 7.
Los de Michael Malone han dominado totalmente los tableros y su agresiva defensa les ha llevado a robar 13 balones en los tres primeros cuartos, permitiéndose el lujo de ganar por 16 puntos un partido en el que apenas han metido el 38% de sus tiros.
Los Knicks no han sido los Knicks. Nadie ha sido capaz de parar el huracán Jokic en el primer cuarto, el equipo ha naufragado en el rebote, ha perdido bastantes balones y no ha tenido capacidad alguna de reacción al verse atrás en el marcador.
El novato Quickley ha terminado como máximo anotador visitantes con 18 puntos. Con 14, Derrick Rose, que fue a menos tras una gran primera parte, Reggie Bullock, RJ Barrett y un Julius Randle que arrancó a jugar muy tarde y que terminó con 5 de 15 en el tiro.
Denver iguala a Clippers con 44-22 -el equipo ya está clasificado para los playoffs- en la lucha por el tercer puesto del Oeste y New York está con 37-29, cuarto en el Este, pero no se puede descuidar si no quiere acabar en el play-in.