Los Spurs son una caja de sorpresas. Cuando no se les espera, allí están. Porque parecen estar siempre, incluso en estos malos tiempos. El equipo texano ha ganado en 48 horas a Clippers y a Lakers en el Staples Center. Un doble triunfo que es una declaración de intenciones.
¡Tercer enfrentamiento esta temporada entre Lakers y Spurs! Y tras dos derrotas, Spurs estrena su casillero de triunfos ante los vigentes campeones. Está claro que los duelos anteriores permitieron al gran Popovich ajustar un buen número de parámetros del juego.
Los Spurs ganaron 109-118. Pero es que no solo ganaron, además jugaron bien. Y por si fuera poco rescataron a LaMarcus Aldridge. Resucitó Aldridge y ese es un gran motivo de alegría. Pero el triunfo fue un triunfo del juego coral de Spurs.
San Antonio atacó muy bien. Volvió a desenvolverse de forma brillante desde el triple. Sumó 28 asistencias por solo 6 pérdidas de balón. Y fue por delante de Lakers en el marcador casi todo el partido.
Aldridge terminó con 28 puntos. No anotó nada en el cuarto final. Pero su tres primeros cuartos fueron espléndidos. DeMar DeRozan sumó 19 más 8 asistencias. Brilló en la primera parte. Dejounte Murray añadió 18 con 8 asistencias. Y Rudy Gay aportó desde la suplencia 15 puntos. Siendo importante en los momentos en los que se jugaba el partido. Además, buenas contribuciones de Lonnie Walker IV y Patty Mills.
En Lakers, 27 puntos y 12 asistencias de LeBron James. Y 23 puntos y 10 rebotes de Anthony Davis. Kyle Kuzma firmó un doble-doble. Horton-Tucker ofreció una muy buena primera parte. Y Alex Caruso salvó también los muebles.
En el lado negativo, jugadores como Dennis Schröder, Montrezl Harrell, Markieff Morris o el mismo Marc Gasol. Los secundarios de lujo que tienen que marcar la diferencia. El español tuvo problemas con las faltas. Le costó mucho entrar en el partido.
Como le costó mucho entrar en el encuentro a los Lakers. El primer cuarto fue un dolor de muelas para el equipo local. Los Spurs acribillaron la defensa de Lakers desde el triple. Aldridge y DeRozan funcionaron a la perfección. Para un 26-34. Con Spurs en 9 asistencias y solo una pérdida de balón.
San Antonio se puso 13 arriba en el inicio del segundo cuarto con un triple de Rudy Gay. Ya había tenido 15 de ventaja en el primer cuarto. Los de Popovich llevaban el partido a las mil maravillas. Control total de la situación. Y 56-65 al descanso con 11 triples anotados de 19 intentos. Y con solo 4 pérdidas de balón.
Lakers no defendía. Lakers no reaccionaba. Lakers había perdido 9 balones. Lakers iba cayendo a pesar de meter el 57,5% de sus tiros.
Llegado el tercer cuarto LeBron puso la directa. Y su equipo lo notó. Lakers se metió en el partido equilibrando el marcador. Entre James y Davis anotaron 23 puntos en el tercer acto. Mientras, Aldridge seguía sosteniendo el ataque de los Spurs.
Muchos esperaban el dominio definitivo de Lakers en el cuarto final. Pero no llegó. Muy al contrario, Spurs volvió a estirar su ventaja. Se llegó a poner 100-114 en la recta final del partido. Y con 104-116 y 2:01 por jugar Frank Vogel arrojó la toalla. En ese momento sustituyó a LeBron y a Davis. Los mandó a la banda. Sin luchar más. Sin apurar las opciones del equipo. Popovich había triunfado. Los Spurs tenían el partido. Y ahora andan con buena marca de 4-4.
En cuanto a Lakers, su 6-3 no refleja su presente. Su marca está por encima de su juego. Y eso sí que tiene que asustar a sus rivales.