Houston es un equipo al alza. Por fin tienen los Rockets a todos sus jugadores importantes sanos. Y por fin el equipo está alcanzando la excelencia defensiva. Anoche, triunfo ante un equipo poderoso, los Sixers. Eso sí, un equipo que sigue sin Joel Embiid.
El camerunés se perdió su octavo partido al hilo. Y sus compañeros se vieron superados por unos Rockets muy sólidos.
El primer cuarto marcó el partido. El 37-21 de los primeros 12 minutos fue una losa para los Sixers. Y el partido llegó con 15 de ventaja para los locales al descanso. Y con 22 de diferencia al final del tercer cuarto. Nunca hubo emoción en el Toyota Center.
Rockets ganó fácil a pesar de su desastre reboteador. Cedieron los locales 22 rebotes en su propia canasta. Y aun así ganaron 107-91 a partir de una gran defensa. Desacierto total en las filas visitantes. Sixers hizo un 37% en el tiro de campo. Aunque lo peor fue su triple: ¡3 de 26!
James Harden volvió a liderar a los suyos. Terminó con 31 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias. Clint Capela hizo 18 tantos, 9 rebotes y 4 robos. Eric Gordon añadió 17 puntos con 5 triples. Y Gerald Green fue el mejor suplente. En una jornada gris en ataque de Chris Paul.
El máximo anotador visitante fue Tobias Harris. El ex de Clippers sumó 22 puntos y 9 rebotes. Jimmy Butler acabó con 19 y 9. Y Ben Simmons rozó el triple-doble. Con 15 tantos, 9 rebotes y 10 asistencias. Es verdad que perdió 7 balones y no tiró bien. Pero bastante hizo teniendo en cuenta que jugó con problemas estomacales.
Peor le fue a J.J. Redick. Negado toda la noche. Terminó con una serie de 1 de 11 en el tiro de campo.
Ahora, Rockets es tercero en el Oeste. Con 40-25. Sigue ascendiendo. Y Sixers es cuarto en el Este. Con 41-25. No terminan de explotar estos Sixers.