La ciudad natal de Martin Luther King, Atlanta, celebró a lo grande el día de uno de sus hijos más universales. Lo hizo ganando contra todo pronóstico a unos Spurs desconocidos que pasaron por el estado de Georgia con mucha más pena que gloria.
Los Hawks vencieron 102-99 con 26 puntos de Dennis Schröder y 20 de Ersan Ilyasova, además de con la buena aportación de su segunda unidad, con 3 de sus integrantes en dobles dígitos anotadores y uno de ellos firmando un doble-doble. Éste último no fue otro que Dewayne Dedmon, ex de Spurs. Está claro que le tenía ganas a su exequipo.
San Antonio no tuvo ritmo de principio a fin. No jugó Kawhi Leonard y el único visitante que mantuvo el tipo fue LaMarcus Aldridge, que acabó con 25 puntos y 11 rebotes.
Nadie más estuvo a la altura. Pau Gasol jugó solo 21 minutos para 6 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias y Manu Ginóbili solo estuvo 5 minutos en la cancha.
Entre los suplentes, mucho tiempo de juego para Davis Bertans, esta vez desafortunado en el tiro, mientras que Patty Mills ejerció como única referencia válida en la segunda unidad.
A pesar de todo ello, San Antonio tuvo triple para forzar la prórroga, pero Danny Green lo falló. Se hizo así justicia. Atlanta merecía ganar el partido.