Salvaje. Brutal. Espectacular. Póngale los calificativos que deseen, pero lo que esta noche han hecho los Clippers de Chris Paul con OKC en el primer partido de las semifinales del Oeste ha sido definitivamente aterrador.
Los Clippers de Chris Paul porque el base fue el gran protagonista del partido al destrozar a Russell Westbrook y liderar a su equipo con una actuación formidable que ha rozado la perfección: ¡32 puntos, 10 asistencias y 8 triples de 9 intentos en solo 28 minutos!.
La paliza del equipo angelino a losThunder en Oklahoma ha sido notable. El último cuarto sobró al llegarse al final del tercer cuarto con 26 puntos de ventaja para los visitantes. Bueno, en realidad sobró toda la segunda parte.
Oklahoma City 105 L.A. Clippers 122 (0-1)
Poco podían imaginar Kevin Durant y Russell Westbrook la que se les venía encima cuando charlaban relajadamente sentados en la banda antes de empezar el encuentro.
Porque luego vino un tremendo varapalo para OKC. El primer partido de semifinales de conferencia contra Clippers fue una auténtica pesadilla tejida por el mejor Chris Paul que se recuerda. Porque lo de CP3 fue sencillamente increíble.
Chris Paul desbarató cualquier guión previo. Rompió el partido ya en el primer cuarto e hizo lo que quiso con el rival. Precisó solo 28 minutos para hacer 32 puntos y 10 asistencias con una serie de tiro casi perfecta: ¡12 de 14 de campo, que incluyó un tremendo 8 de 9 desde el triple!. Jamás había metido Paul tantos triples en su carrera y jamás había tirado con tan alto porcentaje de campo habiendo intentado al menos 10 tiros. Fue, sin duda, la noche mágica del base.
Y de ello se beneficiaron unos Clippers, que empezaron en modo humano. Mediado el primer cuarto, OKC dominaba el marcador 16-13, pero entonces entró en ignición Paul y lo trastocó todo. Triple a triple, jugada a jugada, fabricó un parcial de 9-26 que culminó con un triple que dejó el marcador en 25-39 al final del primer cuarto. La defensa de Thunder era un coladero.
Lo peor para OKC es que su defensa siguió siendo un coladero en el segundo y el tercer cuarto. De este modo, tras encajar 39,30 y 35 puntos en cada uno de los 3 primeros cuartos, Oklahoma se presentó en el inicio del último período 26 puntos abajo (78-104). Todo un repaso.
En ningún momento tuvo opciones OKC. Los Clippers se divirtieron a lo grande una vez van dejando un poco por el camino el asunto Sterling. Y Doc Rivers no sufrió esta vez en la banda.
A la actuación memorable de Paul, le acompañaron dos secundarios de lujo: Blake Griffin (23 puntos) y Jamal Crawford (17 tantos en solo 19 minutos). Ni siquiera necesitó el equipo el buen concurso de un apagadísimo DeAndre Jordan, que solo capturó 5 rebotes y que hizo un 1 de 8 desde el tiro libre. Los visitantes finalizaron con un 55% en el tiro de campo y destrozaron al rival desde el triple al anotar 15 lanzamientos con un 51,7% de eficacia. Además, solo perdieron 9 balones. Ataque sin fisuras.
OKC no tuvo a nadie en su sitio. El equipo tiró, pero sin convicción, de Russell Westbrook (29 puntos) y Kevin Durant (25), pero ni el base ni el alero alcanzaron sus mejores prestaciones. Westbrook no pudo en defensa con Paul, solo lanzó 14 veces a canasta y perdió más balones -6- que asistencias dio -4-. Aún así fue el que más intentó salirse del guión. Y Durant anduvo siempre bajo control, sin chispa.
Tras ellos, solo Serge Ibaka superó la decena, aunque no brilló en modo alguno. Thabo Sefolosha recuperó su titularidad, y resultó importante la falta de contribución de jugadores secundarios como Reggie Jackson, Caron Butler o Steven Adams.