Volvió Carmelo Anthony tras estar 10 días de baja y apareció por fin la mejor versión de Iman Shumpert. Esos dos ingredientes bastaron para que los Knicks cambiaran radicalmente su mala cara de la presente temporada para obtener anoche un sonado triunfo en San Antonio, que contó con un excepcional Marco Belinelli, que no pudo resolver más cuando falló su último tiro, y un notable Manu Ginóbili, que sumó un doble doble con puntos y asistencias.
También ganaron los Sixers a domicilio. El equipo de Philadelphia se está acostumbrando a ganar fuera tras llegar a perder en 13 visitas consecutivas. Thaddeus Young y Evan Turner llevaron la manija del equipo.
En el Jazz-Bucks, victoria local con Gordon Hayward y Derrick Favors al frente y buen partido de los suplentes locales.
San Antonio 101 New York 105
La gran noche neoyorquina llegó el 2 de enero, con el nuevo año. Victorias de Nets y Knicks de prestigio en las complicadas canchas de los dos cocos del Oeste: OKC y San Antonio.
Los Knicks venían de perder en los últimos 10 días todos sus partidos en ausencia de Carmelo Anthony y fue regresar su estrella y resucitar el moribundo Iman Shumpert y todo cambiar de repente. La oscuridad se hizo luz. Y en un sitio poco propicio para lucirse por su dificultad, el AT&T Center, si bien Spurs está empezando a flaquear algo como local.
El partido fue de Melo y Shumpert. Un triple de Tony Parker acercó a 3 a los Spurs a 3:25 del final (91-94) y a 2 minutos exactos de la conclusión una cesta de Tim Duncan adelantaba a los locales 98-96 tras firmar un parcial de 13-2. Ni Parker ni Duncan tuvieron su día, pero ese parcial aupado por ellos parecía significar el fin de los Knicks. No fue así.
Reaccionaron los neoyorquinos y lo hicieron de la mano de sus jugadores del partido, Anthony y Shumpert. Melo empató a 98 y un triple de Shumpert puso el 98-101 a 39 segundos del final. A partir de ahí, la locura. Marco Belinelli, partidazo el suyo, empataba celéricamente a 101 con otro triple, Shumpert respondía con el 101-103 y ahí llegamos al momento clave en el que el enorme Belinelli ya no pudo sostener más a su equipo y falló un triple para adelantar a los Spurs a 14 segundos del final. Rebote para J.R. Smith, que hizo otro partido malo, y Melo terminó cerrando el choque con 2 libres ganadores. El triunfo, sufrido triunfo, era para los neoyorquinos.
Los Knicks vivieron de sus buenos porcentajes, de su correcto trabajo en el rebote y, sobre todo, del gran día de su dúo Anthony-Shumpert. El primero sumó 27 puntos, 12 rebotes y 4 pases de canasta y el segundo se fue a otros 27 con una serie de 6 de 8 desde el triple. Y ambos fueron cruciales en el momento de la verdad. Los 27 puntos de Shumpert constituyen el mejor registro desde que está en la NBA.
Otro que batió su marca anotadora en la NBA fue Belinelli, el mejor local con 32 puntos y un 6 de 9 desde el triple. Pero no tuvo a nadie más como apoyo salvo a un Manu Ginóbili que firmó 11 puntos y 12 asistencias en 28 minutos y que cada vez que estuvo en cancha dio sentido al juego de su equipo, que con él en acción funcionó mucho mejor. Eso sí, no pudo vivir duelo argentino alguno porque Pablo Prigioni sigue lesionado. Discretas actuaciones de Parker y Duncan. Ahí estuvo el asunto.
Sacramento 104 Philadelphia 113
Cambio radical de mentalidad de Philly como visitante después de ganar en L.A. a los Lakers. Hasta entonces, el equipo de Filadelfia arrastraba 13 derrotas seguidas fuera de casa. A partir de ahí, 3 victorias al hilo a domicilio. La tercera llegó anoche.
Fue en Sacramento tras 3 brillantes primeros cuartos que pusieron con 15 de ventaja a los Sixers, que dispusieron de un tremendo Thaddeus Young (28 puntos y 6 robos en un partido completísimo) y un no menos productivo Evan Turner (24 tantos, 10 rebotes y 6 asistencias). Tony Wroten metió 21 puntos y Lavoy Allen volvió a hacerlo bien en una jornada sin gracia de Michael Carter-Williams.
Hasta 58 faltas se pitaron en el encuentro, un partido que los Kings tiraron por la borda por su mala defensa y su escaso juego coral, que se tradujo en una estadística aterradora: 14 asistencias y 23 pérdidas de balón.
DeMarcus Cousins, brutal con 33 puntos y 14 rebotes, Isaiah Thomas -23 tantos, 7 asistencias y 4 triples- y, en menor medida, Rudy Gay -18 puntos- volvieron a absorber todo el juego ofensivo de Sacramento, si bien aún dejaron un hueco en el último cuarto para que Jimmer Fredette nos deleitara con una de esas borracheras magníficas que solía ofrecer en su periplo universitario. Anoche, terminó con 15 puntos en 17 minutos.
Utah 96 Milwaukee 87
Dos equipos de la clase más baja de la NBA pero con bien distintas trayectorias. La buena, últimamente, es la de los Jazz, que siguen mejorando. Con la de esta noche suman 11 victorias por 7 de los Bucks.
Triunfo mormón con 22 puntos de Gordon Hayward y 21 más 11 rebotes y 4 recuperaciones de Derrick Favors. El equipo local metió todos sus tiros libres -17 de 17- y los suplentes que utilizó se comportaron muy bien al meter 36 puntos con 3 jugadores en 10 o más puntos.
Milwaukee no pudo contar con John Henson, siguió sufriendo el desastre deportivo de O.J. Mayo y padeció la mala jornada de Brandon Knight. Demasiados obstáculos. Larry Sanders lideró al equipo con 16 puntos, 8 rebotes y un 7 de 7 en el tiro de campo y Luke Ridnour hizo un encuentro digno.