Ni el partidazo de Carmelo Anthony en ataque anotando 45 puntos, ni el sorprendente rendimiento defensivo de Andrea Bargnani parando en seco en la zona a Dwight Howard fueron suficientes para que los Knicks impidieran una nueva derrota en el Madison Square Garden.
Al menos, plantaron cara a unos poderosos Rockets que sobrevivieron al atasco ofensivo de Howard en la pintura y a la ausencia del turco Omer Asik por decisión técnica después de que el jugador pidiera el traspaso. Se pasó el internacional otomano todo el partido sentado en el banquillo con cara de pocos amigos.
Fue James Harden el gran acaparador de los flashes finales con 36 puntos y 2 libres decisivos anotados a 2 segundos de la conclusión. Le acompañaron muy bien un estupendo Chandler Parsons y un Jeremy Lin que empezó fatal para terminar muy bien ante la que fuera su afición.
New York 106 Houston 109
Andrea Bargnani demostró anoche que si lo intenta puede. 'Il Mago' es un jugador lleno de fundamentos técnicos y con una gran capacidad ofensiva, pero suele apegarse poco a la lucha en la pintura y a la defensa. Pues bien, lo que ya sabíamos quedó corroborado: es una cuestión de actitud. Anoche la tuvo y grande... y Howard lo sufrió en sus carnes.
Partidazo inesperado de Bargnani en defensa y en ataque para sumar 24 puntos por 7 de Howard, que sólo metió 1 canasta en todo el partido (1 de 5), que recibió incluso un soberano tapón del italiano y que llegó a desesperarse por momentos. Además, actuación memorable de un grandísimo Carmelo Anthony, que se fue a 45 puntos y 10 rebotes. Y, sin embargo, nueva derrota neoyorquina.
El primer cuarto finalizó con 23-28 para Houston tras el triple sobre la bocina de Francisco García, que hizo una buena primera parte para languidecer en la segunda y terminar con 8 puntos, todos al descanso, y 2 tapones en 16 minutos.
Llegó el segundo cuarto, Bargnani seguía dominando a Howard y Melo apretaba, pero Parsons, Harden y compañía se iban de 12 puntos (39-51) pese a la negrura en el tiro de un desafortunado Jeremy Lin y la completa incapacidad ofensiva de Howard. Sin embargo, una reacción tardía pero muy oportuna de Knicks, con Melo y Bargnani como protagonistas, fabricó un parcial final de 13-2 para dejar el marcador al descanso en un apretado 52-53. Por entonces, Anthony llevaba 26 puntos, la mitad de los puntos de su equipo.
La segunda parte nos dejó un encuentro igualado aunque con cierto dominio texano, un dominio que se llegó a cuantificar en 8 puntos jugándose ya el cuarto cuarto y en 7 tantos a apenas 3 minutos del final. Pero Knicks no se rindió, ésa fue su gran virtud. La mejora de J.R. Smith en la segunda parte ayudó a ello, aunque a esa mejora se opuso el notable incremento de juego de Jeremy Lin también en la segunda mitad.
Y se llegó a la recta final, con Anthony regalando 1 punto al rival por no saberse el reglamento, su único lunar de la noche, y con James Harden colocando el 106-109 con 2 libres anotados a 2 segundos del final. El margen era muy pequeño para los locales, que nada pudieron hacer con un triple lejanísimo de J.R. para buscar la prórroga sobre la bocina.
Terminó el partido con buenas noticias para Houston, que empezó con malas noticias con el conflicto con Asik y la lesión en el primer cuarto, nada más salir a pista, de Greg Smith, que no tiene buena pinta. Harden acabó con 36 puntos, 9 rebotes y 16 de 18 en los libres, Parsons añadió 22 tantos y Lin 21 tras empezar con un 0 de 8 en el tiro. Howard, mientras, 7 puntos, 15 rebotes y 4 tapones.
En Knicks, además de los 45 de Melo y los 24 de Bargnani con 3 triples sin fallo, los 15 tantos, 8 rebotes y 3 robos de un Smith que empezó mal y mejoró luego. Mal Iman Shumpert, partido para no recordar de Pablo Prigioni, que cometió 3 faltas en 7 minutos y se quedó en blanco, e inoperantes los suplentes salvo Tim Hardaway Jr.