Phoenix Suns ya está en playoffs. El equipo de Monty Williams necesitaba ganar a San Antonio para lograr su pasaporte para la postemporada, y los pronósticos se cumplieron, ya que Spurs, un equipo plagado de bajas, ofreció poca resistencia.
Sexta victoria consecutiva de los Suns, un equipo que con Kevin Durant en pista sigue invicto. El alero ha jugado 7 partidos con su nueva escuadra y los ha ganado todos.
Ahora anda Phoenix muy cerca de asegurar la cuarta plaza en el Oeste, lo que le daría el factor cancha en la primera ronda de los playoffs.
Fue este un partido fácil para los locales ante un rival con escasa entidad. El 42-25 del primer cuarto ya marcó la pauta. Phoenix llegó a tener una ventaja de 31 puntos jugándose el segundo cuarto, a partir de ahí se fue relajando permitiendo que los texanos se llegaran a colocar a 9 puntos, pero parecía obvio que Phoenix tenía varias marchas más que San Antonio. Nunca hubo un peligro real para los Suns, que ahora tienen marca de 44-35.
Phoenix dispuso de 27 puntos de Devin Booker, 22 de Chris Paul, 19 más 11 rebotes de Deandre Ayton y 18 de Kevin Durant, además de las muy buenas aportaciones desde la suplencia de Torrey Craig, que fue importante cuando San Antonio se acercó, y Bismack Biyombo.
Los Spurs, que estuvieron por debajo del 40% en el tiro y que fueron muy inferiores en el rebote, acudieron al juego con solo 10 jugadores activos. Malaki Branham, con 21 puntos, y Tre Jones, con 20 y 9 asistencias, fueron sus mejores hombres.