Sufrieron los Celtics para imponerse a unos Spurs que jugaron sin sus tres grandes referentes: Keldon Johnson, Devin Vassell y Jakob Poeltl. El equipo de Popovich hizo de tripas corazón y engalanado con su mejor versión colectiva peleó por el triunfo.
Boston se impuso a duras penas 116-121 para sumar 6 victorias en sus últimos 8 partidos y situarse con marca de 28-12.
El equipo visitante siempre fue por delante en el marcador pero nunca fue capaz de romper el partido, acumulando siempre exiguas ventajas que no le dieron para vivir de las rentas en ningún momento.
Josh Richardson empató para los locales, poniendo el 116-116 a 37 segundos del final del partido. Fue entonces cuando Jayson Tatum sacó lo mejor de sí para tirar de los suyos con una canasta que llevó el 116-118 al luminoso con 33 segundos por disputar.
Pero Boston aún no había ganado. Con 116-118 a su favor dispuso de 2 libres en las manos de Tatum, que metió el primero y falló el segundo faltando ya muy pocos segundos, pero con 116-119 Al Horford se hizo con un rebote ofensivo crucial que evitó que los nervios subieran de rango en su equipo, encauzando con esa acción la victoria.
En esos segundos finales, con 116-118 en el marcador el local Jeremy Sochan erró un triple importantísimo.
Boston tuvo a 3 jugadores reinando en su ofensiva, con Jayson Tatum y Jaylen Brown acumulando responsabilidad hasta sumar 52 tiros de campo intentados, 26 por cabeza. El primero acabó con 34 puntos y el segundo con 29.
El tercer jugador importante en la ofensiva visitante fue Malcolm Brogdon, que tuvo una jornada feliz con 23 puntos, 7 asistencias y un 5 de 6 desde el triple.
Destacar también el vuelo que va tomando el juego de Robert Williams III según pasan los días tras superar su lesión. Este sábado... 10 puntos, 11 rebotes y 4 tapones en 22 minutos. Empieza a impresionar.
No fue un buen día para los Celtics a pesar del triunfo. Derrick White dio 11 asistencias y puso 3 tapones y el dominicano Al Horford jugó 32 minutos, no estuvo fino en ataque y terminó con 4 puntos y 11 rebotes.
Los Celtics basaron en gran parte su victoria en su mayor acierto desde el triple, desde donde los de Boston se ejercitaron con eficacia y los de San Antonio se mostraron bastante ineficaces.
San Antonio hizo un gran partido, rindiendo por encima de sus aparentes posibilidades, dadas las bajas que sufría. Y eso fue posible gracias al espíritu colaborativo de todos los jugadores, que se movieron siempre en clave colectiva.
Hasta 8 jugadores de Spurs hicieron dobles dígitos anotadores, 4 titulares y 4 suplentes.
Zach Collins (18 puntos, 12 rebotes y 5 asistencias), Tre Jones (18 puntos y 5 asistencias) y Josh Richardson (18 puntos) lideraron el ataque local.
Al final no pudo ser. Boston tiró de su mayor calidad, con Tatum escuchando muy lejos de Boston gritos de "MVP, MVP...".