Sufrieron, y mucho, los Bucks para poder doblegar a los Hornets. Victoria por 127-125 para sumar ya 8 triunfos consecutivos que colocan a los vigentes campeones con un registro general de 14-8, acercándose poco a poco a los puestos cabeceros del Este.
El partido nos dejó un fantástico duelo cargado de talento entre el local Giannis Antetokounmpo y el visitante LaMelo Ball, y también nos dejó el debut con Milwaukee del recién fichado DeMarcus Cousins, al que no se le vio mal. Sumó 7 puntos y 4 rebotes en 15 minutos de juego.
Los que sí estuvieron por encima de todos fueron Giannis y LaMelo. El griego acabó con 40 puntos, 12 rebotes, 9 asistencias, 15 de 24 en el tiro de campo y canasta ganadora llena de determinación lograda a 2 segundos del final. Y Ball finalizó con 36 puntos -su mejor marca personal en la liga-, 9 asistencias y 8 triples estando por encima del 50% de efectividad desde el perímetro, uno de los cuales empató el partido 125-125 con 5,9 segundos por jugar.
El final pareció tener un héroe a cada momento. Primero fue Khris Middleton anotando 5 puntos en el último minuto; después fue LaMelo Ball con un triplazo que puso el 125-125; muy poco más tarde el héroe ya era Anteto con su canasta a la postre ganadora; y todavía pudo serlo sobre la bocina Miles Bridges, que lanzó un triple a la desesperada desde su campo que se salió de dentro tras dejar con el corazón en un puño a los aficionados locales.
Milwaukee supo sufrir para ganar y permanece invicto cuando su big three está disponible, todo un dato a tener en cuenta.
Además del partidazo de Antetokounmpo, Milwaukee tuvo a Khris Middleton con 21 puntos (6 de 18 en el tiro), yendo a más, y dispuso de los 16 puntos y 7 rebotes de Grayson Allen, que fue uno de los 7 jugadores locales que metieron 10 o más puntos.
Los Bucks sobrevivieron a un primer cuarto excepcional de Hornets, que ganó en los primeros 12 minutos 25-41 porque metió nada más y nada menos que 10 triples, acabando el partido los visitantes con 21 triples en su haber.
Fue tras el descanso cuando los de Wisconsin empezaron a revertir una situación complicada que les había dejado en muy mal lugar en el primer cuarto y que les había llevado al descanso perdiendo 60-68, con Kelly Oubre Jr. habiendo anotado ya por entonces 20 puntos y con Charlotte ganando por 8 puntos tras haber perdido 11 balones, algo que tiene su mérito.
El partido fue tremendamente igualado y bastante intenso, dejándonos los árbitros un ejemplo de mal pitar en una jugada en la que a 2:45 del final Gordon Hayward terminó lanzando libres cuando le había dado un codazo involuntario a Grayson Allen en el cuello, decisión que soliviantó a la parroquia local. Por lo demás, fue un final muy bello, con acierto por ambos bandos en los últimos segundos y eclosión en esos momentos cruciales de las estrellas de ambos equipos.
Charlotte sigue demostrando la valía que tiene su plantel. Además de LaMelo, Oubre Jr. acabó con 25 puntos, Miles Bridges sumó 22 más 9 rebotes y Gordon Hayward finalizó con 18 tantos.
Al final del partido, Anteto y Ball intercambiaron sus camisetas, las camisetas que más brillaron en la cancha durante toda la noche.