Lakers hizo un muy digno partido en Milwaukee, pero terminó perdiendo 109-102 ante un equipo que todavía está a años luz del equipo que ganó el anillo hace unos meses. Eso sí, el que no estuvo lejos de su rendimiento en la últimas Finales fue Giannis Antetokounmpo.
El griego fue un auténtico vendaval que se llevó por delante a los de Vogel. Brutal actuación del dos veces MVP comiéndose literalmente a Anthony Davis, que en defensa nada pudo hacer ante el poderío de la estrella local, que terminó con números despampanantes: 47 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias. Pero lo más increíble de Anteto estuvo en su extrema efectividad de cara al aro: ¡18 de 23 en el tiro de campo, 3 de 4 desde el triple y 8 de 11 en los libres! Simplemente impresionante.
Los Bucks reunieron por fin a su big three. Este ha sido el tercer partido de la temporada en la que lo han logrado y los tres se han saldado con triunfos. Sin el trío estelar al completo, 4-8.
Recuperó Milwaukee a Khris Middleton, que se había perdido los 8 partidos anteriores. Fue de menos a más el alero para terminar con 16 puntos (la mitad de ellos en el último cuarto), 5 rebotes y 6 asistencias en 30 minutos. Dejó atrás Middleton la Covid-19 y está a punto de dejar también atrás al mismísimo Ray Allen. Por de pronto, le ha empatado como el primer triplista de la historia de la franquicia. Ahora, ambos tienen 1.051 triples convertidos con los Bucks.
Además, Bobby Portis completó una gran primera parte. Todos sus puntos, 17, los metió antes del descanso. Pat Connaughton hizo 16 puntos y metió 4 triples partiendo de la segunda unidad y Jrue Holiday estuvo bastante negado en el tiro, pero contribuyó enormemente a la victoria con su trabajo defensivo y su aportación en muchos apartados del juego. De hecho, fue el jugador local que más tiempo permaneció en cancha.
Esta vez, Bucks contó con la versión menor de Grayson Allen y con una suplencia en la que solo anotó Connaughton.
El equipo de Budenholzer ha empezado la temporada a bajo ritmo competitivo debido en gran parte a las lesiones. Poco a poco ha ido vaciando su enfermería, en la que todavía se hallan Brook Lopez y Donte DiVincenzo, y aligerar la enfermería va a revertir a buen seguro en una mejora del equipo.
Lakers, mientras, también ha recuperado a varios jugadores últimamente, pero sigue sin Trevor Ariza, Kendrick Nunn y, sobre todo, LeBron James, que en los 8 partidos que lleva de baja ha visto a su equipo perder 5 veces.
A pesar de la derrota, Lakers ofreció signos positivos, o al menos algunos aspectos que pueden mover a cierto optimismo.
Lo mejor de estos Lakers ahora mismo es Talen Horton-Tucker, que venía de hacerle 28 puntos a Chicago y le endosó hoy 25 puntos y 12 rebotes a Milwaukee. Sigue creciendo este jugador, que parece que no tenga 20 años.
Otro aspecto positivo fue el buen rendimiento de Russell Westbrook (19 puntos, 15 asistencias con solo 3 pérdidas y aceptables porcentajes de tiro). Al menos está poniendo un enorme empeño en que las cosas salgan bien.
Y otra cuestión positiva fue la enorme mejora defensiva de Lakers en la segunda parte tras encajar 64 puntos en la primera, una primera mitad en la aque Anteto hizo un auténtico roto al equipo angelino con 28 puntos y 12 de 13 en el tiro de campo.
Davis (18 puntos y 9 rebotes) no estuvo como en sus mejores noches y se vio impotente en defensa ante Antetokounmpo. Además, mal desempeño de la segunda unidad visitante, con Monk y Ellington ofreciendo en conjunto un 2 de 14 desde el triple.
Los Lakers, que ahora están 8-8, se pueden quejar de que Milwaukee acabara el partido con solo 10 faltas, incluida una no pitada a Anteto en un mate de Davis, una acción muy peligrosa del griego que quedó impune, pero lo cierto es que a los angelinos les volvió a faltar clarividencia a la hora de moverse con éxito en un partido con marcador ajustado.
De hecho, no tuvieron opciones reales de victoria en los 3 minutos finales y definitivamente bajaron los brazos cuando con 107-101 en el marcador Carmelo Anthony falló un triple que hubiera exigido a los locales.
En definitiva, Bucks ganó con justicia, pero con poco margen, y lo hizo gracias a una actuación deslumbrante de Anteto.