Suma y sigue. Los Suns no pierden su racha triunfal, que se eleva ya a 14 victorias consecutivas para situarse con un 15-3 en la clasificación tras llevar su marca como visitantes a un imponente 7-1. Esta vez se trató de un triunfo muy trabajado, porque Cleveland opuso una resistencia numantina.
Los Cavs quedan en negativo (9-10), pero los matices son importantes, y todos los matices juegan a favor de Cleveland, que acumula derrotas últimamente, pero ante los mejores equipos de la liga debido a un calendario aterrador. Sus últimos 4 partidos los ha jugado contra Nets, Warriors, otra vez Nets y Suns, y en todos ha competido por el triunfo. Perdió ante Nets por 10, ante Warriors por 15 al hundirse en el cuarto final, ante Nets por 5 y ante Suns por 5. Inmenso mérito el de estos Cavs.
Eso sí, Phoenix pertenece a otra liga. Da igual que muchos ninguneen a los vigentes subcampeones de la NBA, pero lo cierto es que forman un grupo espléndido tanto dentro como fuera de la cancha, porque hay sensaciones que quedan en el espectador cuando los ve jugar que denotan una gran química entre sus componentes. Se ve que aquí hay un equipo.
El triunfo trabajado de Suns se cifró en un apretado 115-120, con Cleveland apurando sus opciones hasta el final. Es la victoria 100 de Monty Williams al frente del equipo, una gran cifra si se tiene en cuenta que está en su tercer año como entrenador jefe.
Si hubo un jugador que mereció desde el principio ser MVP del juego, ese fue Devin Booker. El escolta ya arrancó encendido al meter 11 puntos en los primeros 6 minutos del choque, y terminó igualmente bien para sumar 35 puntos con un fantástico 14 de 21 en el tiro de campo.
Phoenix estuvo por encima del 50% en el tiro, y cuando tuvo problemas recurrió a los de siempre, al citado Booker y al decisivo Chris Paul, que hoy le dio a su equipo 17 puntos y 12 asistencias.
También funcionó Deandre Ayton (16 tantos y 9 rebotes), así como suplentes como Cam Johnson y JaVale McGee. El pívot está acallando a muchos que siguen tomándoselo a broma. Hoy, 13 puntos y 12 rebotes en 20 minutos.
La diferencia estuvo en la definición. Chris Paul no erró un solo tiro libre en el final (hasta Booker falló uno), pero el que se llevó la palma en lo negativo en el desenlace fue Ricky Rubio, que no pudo derrotar a su exequipo.
El internacional español erró 2 libres muy importantes y falló un tercero, este intencionadamente, pero lo ejecutó tan mal que atravesó el balón las redes de la canasta sin tocar el aro. Ahí se esfumaron las opciones que tenía su equipo de buscar al menos la prórroga. Una pena, porque Ricky es de lo más fiable en los libres. Parece que le pesó en la cabeza su calidad de ex de Suns, y todo lo que conllevó para él su salida del equipo. No fue el día de Rubio en el tiro. Logró 15 puntos y 5 asistencias, pero con 5 de 20 en el lanzamiento de campo.
El local Jarrett Allen volvió a brillar con luz propia al acabar con 25 puntos, 11 rebotes y 9 de 10 en el tiro, Cedi Osman añadió 23 puntos en una noche caliente desde el triple, Darius Garland estuvo por el contrario negado desde el perímetro, pero sumó 19 puntos y 7 asistencias, y lo mejor de Cavs vino de la mano de su segunda unidad. Excelente el ya citado Osman, irregular Ricky Rubio y muy buenos minutos de Kevin Love, que sigue alzando el vuelo.