No parecen tener arreglo. Ben Simmons parece desconectado de su equipo y su equipo cada vez está más frustrado con el jugador. El último capítulo ha sido la negativa del australiano a abordar sus problemas mentales con los médicos del club.
Publica ESPN que Simmons no quiere afrontar sus problemas de índole mental con el cuerpo técnico de Sixers, al que sí ha recurrido para intentar solucionar las molestias que tiene en la espalda.
Simmons lleva trabajando, según ha trascendido, desde el pasado verano con profesionales de la salud mental. Lo lleva haciendo a través de la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto (NBPA, en sus siglas en inglés), aunque esas reuniones médicas no han llegado al club, en el sentido de que Sixers no ha recibido detalle alguno de las mismas.
La preocupación de la franquicia no era otra que ayudar a Simmons a prepararse mentalmente para volver al juego (y de paso saber, claro está, si los problemas que aduce son reales).
No hay que olvidar que el convenio colectivo de los jugadores fija que estos tienen protegidos sus salarios en el caso de tener problemas de índole mental, algo que el jugador comunicó al club el pasado 22 de octubre, cuando ya había perdido cerca de 2 millones de dólares a raíz de diversas multas por incomparecencias en entrenamientos, reuniones y partidos. Desde entonces, Sixers dejó de multar al jugador sin que la situación entre las partes haya mejorado.