Estaba cantado y así fue. Ben Simmons no compareció este lunes en el primer partido de preparación de los Sixers en la pretemporada y su ausencia le ha costado 360.000 dólares. Su equipo perdió ante Toronto Raptors 123-107.
No jugó Joel Embiid y la nota más positiva para los Sixers fue ver en una gran forma al recién fichado Andre Drummond, autor de 19 puntos, 14 rebotes y 4 tapones en 24 minutos, un Drummond al que se vio con hambre de pista tras su fiasco con Lakers.
En cuanto a Simmons, se encuentra en rebeldía y su negativa a jugar le va a costar muy cara, ya que perderá 360.000 dólares de su sueldo por cada juego en el que se niegue a participar.
Los 360.000 dólares que perdió anoche le serán descontados de los 8,25 millones de dólares que su equipo no entregó al jugador, colocándolo en un depósito de garantía, 8,25 millones que correpondían al segundo de los cuatro plazos estipulados en el año para abonar el salario a Simmons.
La situación del All-Star con el club de Filadelfia no ha cambiado. El desencuentro es total y no parece atisbarse una pronta solución.