Fue un partido extraño. Jugado por fases. A impulsos. Con momentos para todos. Lleno de luces pero también de sombras. Pero entre tantos vaivenes LeBron James y Anthony Davis no perdieron el rumbo. Salieron triunfantes. Fueron los líderes indiscutibles de la victoria de Lakers.
Lakers ganó 117-109 para ponerse 1-1. Tras desperdiciar una ventaja de 21 puntos (42-21 en el segundo cuarto). Y llegar a ponerse 5 abajo (80-85 en el tercero). Al final, Houston apretó pero no ahogó. Y el equipo que tuvo el dominio del partido terminó ganándolo.
James y Anthony lo fueron casi todo. Casi todo porque hubo otros elementos de Lakers que tuvieron su importancia. Fundamentalmente la segunda unidad. Con la aparición puntual de un gran Markieff Morris. Con la mejora de Kyle Kuzma. Pero sobre todo con la versión feliz de Rajon Rondo.
Rondo jugó 29 minutos. En ese tiempo, su equipo hizo un +28. Jugó a grandísimo nivel. Defendió como si hubiera viajado al pasado. Sumó 10 puntos, 9 asistencias y 5 robos de balón. Morris, mientras, se mostró en estado de gracia en el primer cuarto. ¡Metió 4 triples sin fallo en 4 minutos de juego! Su espíritu de francotirador hizo que ese primer cuarto acabara 36-20. Tremenda exhibición de Lakers.
Pero el hilo conductor siempre fue de James y Davis. LeBron dominó la escena. Logró 28 puntos, 11 rebotes, 9 asistencias y 4 robos. Y superó a Ray Allen en la lista de triples en playoffs. Ya es el segundo de la historia. Solo le supera Stephen Curry. Davis firmó 34 puntos y 10 rebotes. Anotó 15 de sus 24 tiros de campo. Supo aprovechar su superioridad física.
A Houston le mató cada vez que se ausentó P.J. Tucker. Con él en pista, +18 para el equipo. Sin él, -26. El día y la noche. Lo peor es que durante la primera parte tuvo que estar sin jugar demasiado tiempo. Por culpa de las faltas. Y su equipo lo notó.
La primera mitad fue coto de los Lakers. El equipo de Frank Vogel defendió a gran nivel. Sobre todo en el primer cuarto. Al final de ese primer acto, 36-20. Con un 62,5% en el tiro de campo y 5 de 7 en triples. Con Rockets en un paupérrimo 31,6% y 6 pérdidas de balón. Al descanso, 67-51. Con Davis y LeBron sumando una burrada. Ya llevaban entre ambos 35 puntos, 13 rebotes y 7 asistencias. Con 14 de 22 en el tiro.
Por entonces, Russell Westbrook estaba en 2 puntos. Con 1 de 8 en el tiro. Y no iría a mejor. Su noche fue espantosa. No aportó nada a los suyos, salvo el rebote. Perdió muchos balones por precipitación. Seleccionó mal el tiro. Se cargó de faltas. Y con él en pista su equipo acabó con un -14. Noche para olvidar cuando parecía adquirir un tono ascendente. Una rémora Russ para su equipo.
Houston resucitó en el tercer cuarto. Auténtica lluvia de triples. En los primeros 8 minutos del cuarto... ¡8 de 9 en el tiro de 3! Impresionante. Para un parcial de 13-34 que situó a Rockets con 80-85 a su favor. Temblaba Lakers. Eric Gordon estaba en racha. Tras acabar el primer cuarto con cero puntos. La defensa de Rockets funcionaba. Lakers encajaba 41 puntos en el cuarto. Tras recibir 51 en los dos primeros. Pero Westbrook se cargaba de faltas. Hizo la quinta a 53,9 segundos del final. Mike D'Antoni le mantuvo en pista.
El último cuarto empezó 90-92. Había partido. Los cimientos de Lakers se tambaleaban. Pero el parcial inicial de 14-4 para el 104-96 tranquilizó a los californianos. Sobre todo, porque LeBron dominaba la situación. Un matazo en alley-oop de James... Un taponazo de LeBron a Westbrook... una brillante pase picado de Caruso en jugada con dos toques para anotar... Todo parecía marchar para Lakers. La ventaja se disparó a 12 puntos (113-101). Pero Rockets acortó hasta 113-107.
Fue en ese momento cuando dos veteranos tomaron la iniciativa. Una canasta de Rondo y otra de LeBron para acabar con el rival. Para situarse 117-109 a 32,3 segundos del final. La victoria ya estaba hecha. Y así fue.
No sirvieron los 27 puntos de James Harden. No tuvo su día más brillante. Tampoco un día gris. Gordon acabó con 24 puntos y 6 triples. Tucker con 18 tantos, 11 rebotes y 4 triples. Robert Covington añadió 17 putnos y otros 4 triples. Y el único titular que desentonó fue Russ. Mientras que el único suplente que aportó fue Danuel House Jr.
Houston metió 22 triples. Con un 41,5% de acierto. Aunque solo encestó 2 en el cuarto final. Aguantó el rebote. Pero le costó defender más de la cuenta en algunos momentos. Y perdió 17 balones.
A Lakers, mientras, le faltó rematar cuando tuvo el partido en su poder. Eso le pudo costar caro. Pero al final ganó. Y eso era lo importante.