Espectacular regreso de Ricky Rubio a Salt Lake City. El base español se medía por primera vez como visitante a Utah Jazz desde su partida del equipo, conjunto para el que jugó un par de temporada. Su rendimiento y el de Phoenix Suns fueron formidables.
Phoenix Suns dominó a lo grande a Utah Jazz para ganar 111-131 con el armador catalán como gran estrella.
Ricky Rubio hizo uno de sus mejores partidos de la temporada, acabando con 22 puntos, 11 asistencias, 7 robos de balón y 6 rebotes en 33 minutos de juego en los que solo perdió un balón. Se mostró atinado en el tiro, incluyendo un 2 de 3 desde el triple, y su equipo hizo un +31 en el marcador con él en pista.
Mientras, su sustituto en los Jazz, Mike Conley, apenas sumó 8 puntos y 1 asistencia en 22 minutos de juego.
Rubio y Devin Booker (24 puntos y 10 asistencias) pudieron doblegar finalmente a un gran Donovan Mitchell. La figura local se fue hasta los 38 puntos y 6 triples, pero no valió de nada.
Phoenix acabó con un 56,3% en el tiro de campo y un 60% en los triples, además de un 21 de 24 en los libres y 33 asistencias en su haber. Gran defensa del equipo de Monty Williams en la segunda parte.
Noche feliz para Ricky en su regreso a la que fue su casa, con caluroso recibimiento desde la grada incluido.
Al jugador español le ha sentado muy bien el descanso del All-Star -venía de un Mundial en el que fue MVP-. Reconoció Rubio que tuvo ante Jazz la frescura de piernas que le faltó en otros partidos.
Además, le vino bien conocer el juego del equipo rival: "Conozco su juego porque jugué con ellos un tiempo largo", recordó el de El Masnou, que ofreció toda una exhibición ante su antigua afición.