Extraña pareja de baile. El dos veces Defensor del Año Rudy Gobert ocupándose de defender al una vez MVP Russell Westbrook, los 2,16 del francés intentando parar durante el partido al escaso 1,91 del base de Houston. Curiosas situaciones a las que lleva el 'small-ball' extremo de Mike D'Antoni y las decisiones atrevidas de Quin Snyder.
Más allá de ese emparejamiento descompensado, el partido Utah-Houston estuvo compensado hasta que llegó el tercer cuarto.
Al descanso se llegó con un apretado 66-62 a favor de los Jazz, que por entonces habían metido el 56,5% de sus tiros y tenían a Jordan Clarkson en plena efervescencia (20 puntos y 5 rebotes). Mientras, los Rockets sumaban ya 10 triples y entre James Harden y Russell Westbrook acumulaban 39 puntos.
Llegó la reanudación y los texanos pusieron la directa con un 19-38 que mediatizó el partido, resultando crucial para el 110-120 final.
Harden y Westbrook siguieron a lo suyo. El primero sumó 38 puntos, 7 asistencias y 6 triples y el segundo añadió 34 puntos. Es decir, ¡72 puntos entre ambos y estando además los dos por encima del 50% de acierto en el lanzamiento de campo! Y, por si fuera poco, entre los dos solo perdieron 5 balones.
Houston metió 20 triples con un 41,7% de acierto e hizo un gran trabajo en el rebote pese a jugar sin hombres altos, destacando en esta faceta el recién llegado Robert Covington.
El mejor de Utah fue Donovan Mitchell con 31 puntos. Jordan Clarkson se apagó en la segunda parte y terminó con 22.