Houston Rockets empieza a enderezar el rumbo y lo hace de la manera más extraña posible: partiendo del extremo. Ese extremo se ha concretado hoy con una victoria ante Minnesota con el mejor Russell Westbrook de la temporada y el peor James Harden del curso.
Triunfo por 124-131 con un Westbrook exultante, autor de 45 puntos (su mejor marca anotadora del curso), 10 asistencias y 6 rebotes. El base hizo 16 de 27 en campo sin lanzar un solo triple y estuvo perfecto desde los libres con 13 sin fallo.
Frente a esa explosión de juego, la implosión de Harden, que hizo su peor anotación de la temporada. Acabó Harden con 12 puntos y 5 asistencias tras hacer un 3 de 13 en el tiro de campo y no meter un solo triple (0 de 6).
Ayudó a Houston la conjunción entre la mejor anotación del curso de Westbrook y la mejor también de Eric Gordon, que acabó con 27 puntos y 6 triples.
Además, 18 puntos, 9 rebotes y 5 tapones de Clint Capela y 16 tantos en 19 minutos de Austin Rivers.
El partido, que acabó con un abultado 40-37 en su último cuarto, nos dejó a Minnesota capturando nada menos que 36 rebotes en la primera parte.
Eso sí, a Timberwolves le mataron sus pérdidas de balón y su incapacidad para frenar a Westbrook.
Muy bien el dúo formado por Karl-Anthony Towns (30 puntos y 12 rebotes en 28 minutos) y Andrew Wiggins (28 tantos). Towns tuvo problemas en la primera parte con las faltas y solo pudo jugar 12 minutos antes del descanso.
Se sumó a ellos Josh Okogie con 17 puntos.