La NBA sanciona a Joel Embiid y a Karl-Anthony Towns tras el poco edificante espectáculo que dieron anoche en el Sixers-Timberwolves al protagonizar una sonada pelea que acabó con los dos jugadores expulsados.
Se jugaba el tercer cuarto cuando sucedió el incidente. Embiid y Towns se enzarzaron en una pelea en la pintura con el juego en marcha, se agarraron, rodaron por los suelos y fueron separados por compañeros y técnicos antes de ser expulsados.
Luego, Embiid se pavoneó en la banda, simuló ser un boxeador entre risas y arengó al público levantando los brazos, acciones todas que tal vez le tenían que haber costado una sanción más imporante que la de Towns.
El vicepresidente ejecutivo de la NBA, Kiki Vandeweghe, ha anunciado la sanción y ha asegurado que "la investigación continúa después del incidente".
La liga no ha sancionado a Ben Simmons al considerarle un elemento pacificador en la pelea, papel que niega Minnesota Timberwolves.
Mientras, Embiid y Towns siguieron enzarzados, esta vez dialecticamente, en las redes sociales hasta altas horas de la madrugada intercambiándose malas respuestas y utilizando un lenguaje grosero, algo que no ha gustado nada a la NBA.