Pocas victorias tan amargas como la lograda anoche por los Pelicans ante los Rockets (115-113). El triunfo ante uno de los equipos más poderosos de la NBA se quedó en nada viendo las consecuencias del partido: New Orleans se queda sin DeMarcus Cousins esta temporada.
Cousins había anotado una canasta crucial en los últimos segundos del partido, una canasta con tiro adicional. Pero cuando lanzó el tiro libre sintió que todo se venía abajo. Se fue de la cancha con el pie muy dolorido y terminó tirado en el suelo con las manos en la cabeza. Era consciente de que algo marchaba muy mal, tan mal como que fue ayudado a la hora de abandonar la cancha porque tenía roto el tendón de Aquiles izquierdo. Gravísima lesión.
El All-Star había firmado ya un triple-doble, su tercero de la temporada, con 15 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias, siendo elemento esencial en el triunfo de los suyos junto a Anthony Davis (27 puntos, 11 rebotes, 5 tapones y 5 asistencias), Jrue Holiday (21 tantos y 7 pases de canasta) y Darius Miller (20 puntos tras meter 6 triples).
La primera parte fue de los locales, con parcial de 66-53 tras un gran segundo cuarto, pero los Rockets reaccionaron tras el descanso.
Pelicans metió el 54% de sus tiros y sumó 36 asistencias, pero esos números no le impidieron sufrir al final, un final ciertamente curioso.
El final y Harden
El final fue tremendo. Primero, por la lesión de Cousins acontecida a 12 segundos del final y después por la jugada lamentable protagonizada por James Harden.
Con 115-112 en el marcador y 4,1 segundos por jugar, atacaron los texanos para buscar el empate. Harden buscó un triple lejanísimo y los árbitros pitaron una falta muy dudosa a su defensor. No fue cuando tiraba. Por eso dispuso de 2 y no de 3 tiros, lo que obligó a Harden a fabricar la lógica estrategia.
'La Barba' metió el primero y lanzó a fallar el segundo para buscar el rebote en pos de la prórroga, ¡pero su tiro no tocó aro y se marchó por la línea de fondo! Espantoso airball que mandó a Houston al infierno.
Chris Paul hizo un partidazo sin premio. Sumó 38 puntos, 8 asistencias, 12 libres sin fallo y no perdió un solo balón. Eric Gordon hizo 27 puntos, James Harden añadió 23 con 11 asistencias, pero tirando mal, y Trevor Ariza se quedó en 9 puntos tras meter 3 triples.