Los 'Splash Brothers' hicieron de las suyas en el United Center. Klay Thompson y Stephen Curry lideraron con manos firmes y muñecas prodigiosas otro triunfo de los Warriors como visitantes, ¡y ya van 14 seguidos fuera de casa!
Con esas 14 victorias consecutivas como vistante Warriors empata el récord de su franquicia y se sitúa como tercera mejor marca de todos los tiempos en la NBA (el récord con 16 es de Lakers en la temporada 1971-1972).
Triunfo en Chicago por 112-119 a pesar de sufrir varios inconvenientes de partida el equipo de Steve Kerr. Porque Golden State jugó sin Draymond Green y sin Andre Iguodala y perdió a los 24 segundos de juego al novato Jordan Bell, que había partido como titular, por un esguince de tobillo.
El primer cuarto resultó burbujeante, con un tremendo parcial de 40-38, los locales se fueron ganando al descanso 66-63, pero la reanudación nos dejó toda la crudeza de estos Warriors: ¡parcial de 12-32 en el tercer cuarto para tomar 17 puntos de ventaja y cerrar el partido! En el último acto se relajaron los californianos, pero el partido ya estaba en sus manos.
Thompson y Curry lo fueron todo en el ataque visitante. Metieron 68 puntos y 13 triples, todos los que anotó su equipo. Thompson se fue del partido con 38 puntos y 7 triples y Curry con 30 tantos, 9 rebotes y 6 triples. Los dos anduvieron por encima del 50% en el tiro de campo.
Curioso fue ver cómo solo ellos dos anotaban triples para Warriors. El resto del equipo: 0 de 9. Kevin Durant ejerció anoche como tercer jugador de Golden State con 19 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias y Zaza Pachulia rindió a grandísimo nivel en los 18 minutos que vio cancha.
Mirotic lidera a Bulls
Esta vez, ni Zach LaVine ni Lauri Markkanen funcionaron en ataque. Entre los dos, 6 de 24 en el tiro.
El liderazgo correspondió a Nikola Mirotic, autor de 24 puntos y 6 rebotes en 27 minutos. Recuperó 3 balones y metió 9 de sus 13 tiros, incluidos 4 triples.
El otro punto positivo de Chicago fue su suplencia. La segunda unidad sumó 56 puntos con Mirotic a la cabeza, bien secundado por Denzel Valentine y Bobby Portis.
En lo negativo, el tremendo porrazo que se llevó Kris Dunn tras hacer un mate. Muy mala su caída.