Chris Paul visitaba por primera vez el Staples Center para enfrentarse a los Clippers. Era su primera visita a su antigua casa. Y no fue fácil. Ya en las presentaciones, un poco de todo. Aplausos. Pero también abucheos. Y muchos. Parte de la afición no le perdona su reciente marcha.
La franquicia angelina le rindió tributo con un vídeo. Cuando se jugaba el primer cuarto. A partir de ahí, Paul tuvo que navegar en un partido cargado de tensión. Como el resto de los jugadores.
Esa tensión se materializó en varias técnicas. Y en las expulsiones de Blake Griffin y Trevor Ariza. Llegando más allá del partido. Al propio vestuario local. Donde a la finalización del juego hubo lío.
Más allá de todo ello, Houston perdió: 113-102. Paul jugó otra vez sin James Harden a su lado. Terminó con 19 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias. Fue de lo mejor de su equipo. Pero no despuntó ante su vieja afición. Y se marchó triste de la que fue su casa durante 6 años.