Frustración es una palabra que no llega a definir lo que siente Jarrett Jack. Lo ha dicho él mismo tras quedar otra vez K.O. por culpa de la rodilla derecha, una rodilla que le ha mantenido fuera de las pistas durante un año y que ahora le vuelve a dejar fuera.
Jack se destrozó la rodilla hace algo más de un año. Rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco interno, pero todo pareció quedar atrás cuando en la recta final de febrero, tras el All-Star, firmó un contrato temporada con los Pelicans. Solo ha durado 2 partidos, y ni eso. Porque en el primero jugó 25 minutos, pero en el segundo solo pudo estar en cancha 8 minutos completamente inoperantes.
Lesionado de nuevo en la rodilla derecha, su equipo ha anunciado que sufre un desgarro en el menisco y que permanecerá de baja entre 4 y 6 semanas.
Todo su bagaje tras el regreso se resume en medias de 3 puntos y 2,5 asistencias tras promediar 16,5 minutos en 2 partidos. Un desastre para el jugador de Maryland, que con 33 años ve cómo la rodilla le está arruinando su carrera.