Cleveland no levanta cabeza desde que perdiera en casa ante Chicago Bulls por 94-106. A partir de ahí, el equipo iniciaba una gira de 6 partidos (1 en el Este y 5 en el Oeste). Pues bien, ya ha disputado 4 de esos 6 partidos y sus resultados no invitan al optimismo.
La gira empezó con 2 victorias ante 2 de los peores equipos de la liga. Triunfos sin convencer a nadie, ramplones, con marcadores poco holgados: 108-116 ante Nets y 116-120 ante Suns. No era, desde luego, un inicio para tirar cohetes, pero se habían salvado los muebles.
Se veía venir y así ha sido. Tras la derrota ante Bulls y las victorias grises frente a Nets y Suns, han llegado 2 fracasos sin paliativos en forma de partidos perdidos en los que la ofensiva de Cavs se ha atascado de mala manera.
Dos derrotas seguidas
El equipo de LeBron James perdió 100-92 ante Utah Jazz, una cancha complicada, y 102-86 anoche ante Portland Trail Blazers a pesar de que el local Damian Lillard no tuvo un partido bueno anulándose mutuamente en el duelo con Kyrie Irving.
Y todavía faltan 2 juegos en esta gira que se le está atragantando a los de Ohio. El quinto consecutivo como visitante llegará ante Sacramento Kings y como traca final visita al Oracle Arena en duelo de los más altos vuelos con Golden State Warriors.
Desde luego, para cuando lleguen a Oakland los chicos de Tyronn Lue ya deberían haberse centrado. De no hacerlo, el resultado puede ser catastrófico.
Por de pronto, los Cavs conservan el liderato del Este con una marca de 28-10, pero 3 equipos en el Oeste presentan mejores resultados que el equipo de Cleveland.