A pesar de la expresión de decepción que mostraba LeBron James en la recta final del segundo partido ante Warriors, la estrella de los Cavaliers dice no estar frustrada. Eso sí, anima a todo el equipo a trabajar mejor en busca de soluciones.
Cleveland pierde 2-0 en las Finales y lo hace con estrépito: 104-89 en el primer partido y 110-77 en el segundo. Jamás había ocurrido algo semejante en la historia de la NBA. Es la mayor diferencia de puntos lograda en los 2 primeros partidos de unas Finales, un +48.
Tras la debacle, LeBron da la cara. "No estoy decepcionado con nuestros jugadores o frustrado. Solo tenemos que hacer mejor nuestro trabajo", asegura.
James se queja del lamentable desempeño ofensivo de su equipo, que está anotando ante Golden State 90 puntos por cada 100 posesiones. Sobre la defensa, opina que a veces se está trabajando bien y otras no. Pero lo que más le enfada es la falta de concentración mostrada en algunas fases de los partidos: "No podemos tener tantas lagunas mentales".
"Todos nosotros tenemos que descubrir las maneras en que podemos ayudar a que el equipo sea competente", ha explicado el jugador de Akron que promedia casi un triple-doble en los 2 partidos jugados. Los números de James: 21 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias. En el lado negativo, su 42,1% en el tiro de campo y el hecho de haber perdido 11 balones en las Finales.