Cleveland tenía por delante dos finales dentro de las Finales, dos partidos a vida y muerte. Perdía 3-1 con Warriors y estaba a un paso de caer. Pero ganó los dos con actuaciones memorables de LeBron James. Repasamos sus históricas estadísticas.
Para empezar, LeBron anotó 41 puntos en el quinto encuentro y otros 41 en el sexto convirtiéndose en el quinto jugador que logra en la historia de la NBA meter 40 o más puntos en dos partidos consecutivos de unas Finales.
Le precedieron en la hazaña jugadores míticos. Rick Barry (1967), Jerry West (1969), Michael Jordan (1993) y Shaquille O'Neal (2000). Es decir, el último en lograrlo lo hizo hace 16 años.
Unos números de otra galaxia
Lo más salvaje es que LeBron no solo se dedicó a anotar. Se cargó a su equipo a la espalda, defendió como el que más y dominó todas las facetas del juego.
Sus promedios en los dos partidos cruciales: ¡41 puntos, 12 rebotes, 9 asistencias, 3 tapones y 3,5 recuperaciones de balón en 43 minutos! Robó 7 balones y solo perdió 3, metió el 56,1% de sus tiros de campo y el 50% de sus triples. Tuvo una eficiencia media de 52 pasando de 50 en los dos juegos. Lo dicho, como si viniera de otra galaxia.