Miami Heat está contra las cuerdas. El equipo de Erik Spoelstra, con una grandísima plantilla pese a la ausencia de Chris Bosh, perdió anoche en casa ante Charlotte y está a una derrota de la eliminación. Victoria de Hornets 88-90 para ponerse 2-3 en la serie.
El partido resultó muy equilibrado y tuvo un final pasional no exento de dudas. El visitante Courtney Lee puso el 88-90 con un triple anotado a 25 segundos del final. Luego, Miami no supo resolver, ya que los tiros de Goran Dragic y Dwyane Wade, el mejor local, fueron taponados. El último, el de Wade, con petición de falta por parte de la afición local.
Los Hornets ganaron demostrando que son un equipo. La escuadra visitante se sobrepuso a la horrible noche de Kemba Walker (14 puntos con 4 de 18 en el tiro). Marvin Williams -17 puntos y 8 rebotes- y Al Jefferson -14 tantos- fueron punta de lanza en el ataque. Y Nicolas Batum volvió al juego.
El jugador francés volvió con inusitada rapidez de su lesión y aportó desde una segunda unidad marcada por la firmeza y la calidad.
No jugó el mexicano Jorge Gutiérrez. El partido andaba demasiado apretado. Y su equipo ganó lanzando mejor de 3 que de 2, sin alcanzar el 40% en el tiro de campo. Eso sí, defendiendo muy bien y agarrándose al partido.
En Miami, Wade no falló en una cita importante. Hizo 25 puntos. El resto no estuvo a su altura. Luol Deng sumó 16 tantos y Hassan Whiteside, un doble doble sin apabullar.