Serbia salvó los muebles a última hora y condenó a Italia a una derrota muy cruel. Los serbios ganaron 76-64 a los italianos en el partido por el séptimo y octavo puesto del Eurobasket 2013, un partido a vida o muerte en el que estaba en juego la última plaza para el Mundial 2014.
El triunfo de los serbios se fraguó en un gran primer cuarto, que finalizó con un contundente 27-11. A partir de ahí, los italianos fueron siempre a remolque y nunca tuvieron opciones reales de triunfo.
Serbia venía de perder ante España por 30 puntos y con Eslovenia por 18. Sin embargo, sacó fuerzas de flaqueza en el momento clave gracias a su buena labor defensiva y al liderazgo de Nenad Kstic, autor de 17 puntos. Nemenja Bjelica hizo 12 con 10 rebotes y Stefan Markovic y Nemanja Nedovic sumaron otros 12 puntos cada uno.
En las filas italianas, 19 puntos del nuevo NBA Luigi Datome y 14 del joven Alessandro Gentile. Además, 11 tantos, 5 rebotes y 6 pases de canasta de Andrea Cinciarini. El que no estuvo nada fino fue Marco Belinelli.
Eslovenia, quinta
Mientras, Eslovenia derrotó por 69-63 a Ucrania en el partido por el quinto y sexto puesto del torneo, un encuentro que ambas selecciones afrontaron con la tranquilidad de haber logrado ya el pasaporte para el próximo Mundial.
La gran estrella eslovena volvió a ser Goran Dragic, que hizo un partidazo y concluyó con 19 puntos, 7 rebotes y 4 asistencias en 26 minutos. Ningún otro esloveno alcanzó la decena en anotación.
En Ucrania, 12 puntos en 18 minutos de Ibor Zaytsev y 12 tantos, 5 rebotes y 4 pases de canasta del jugador de origen estadounidense Jeter.