Vía libre para volver a las pistas. Al menos, eso dice Channing Frye, el pívot de los Suns de Phoenix que se quedó fuera de juego toda la pasada temporada por un grave problema cardíaco. El jugador ha recorrido consultas y más consultas de los médicos más prestigiosos y ahora parece empezar a ver la luz.
Frye ha asegurado en una entrevista concedida a Kris Habbas en su podcast semanal de la web "Bright Side of the Sun" que los médicos consultados por él, los mejores del país, consideran que puede volver a la alta competición.
El jugador asegura que se ha tratado de un proceso complicado y que los numerosos médicos que ha consultado le han dado el visto bueno, lo que no quiere decir que vaya a volver a jugar, ya que para que ello sea posible deberá contar con el beneplácito del equipo médico de los Suns, escuadra con la que tiene contrato hasta el verano de 2015.
"He recibido el alta médica por numerosos médicos que he visto. Este proceso ha sido llevado con esmero por ambas partes, desde mi parte y la de los Suns. Ambos queremos hacer lo que sea mejor", afirma el jugador.
Frye, de 30 años, no jugó un solo partido la pasada campaña, en la que cobró 6 millones de dólares vía compañía aseguradora. A su contrato le queda un 2013-2014 a razón de 6,4 millones completamente garantizados y una última temporada, la 2014-2015, en la que el contrato incluye una opción de cancelación y cuyo salario ascenderá a 6,8 millones.