Los representantes de los propietarios de los equipos y de los jugadores se han reunido en Nueva York durante 4 horas que han resultado insuficientes para acercar posiciones. La reunión ha sido infructuosa y ahora el inicio de la temporada regular está en serio peligro.
El próximo lunes, si todo sigue igual, se anunciará la suspensión de las 2 primeras semanas de la temporada regular.
Lo que sí está definitivamente suspendido es la pretemporada. La NBA estima que la cancelación de la pretemporada supondrá unas pérdidas de 200 millones de dólares.
El Comisionado de la NBA, David Stern, ha asegurado tras la reunión que "no hemos sido capaces de conseguir los progresos que esperábamos" y ha reconocido que "no podemos seguir con las negociaciones". Stern ha comparecido ante los medios de comunicación en compañía del Vicecomisionado, Adam Silver.
Stern ha llegado a asegurar que los dueños han ofrencido a los jugadores un reparto equilibrado del 50% con respecto al pastel de la NBA, el porcentaje de ingresos que se destina a los jugadores, por una parte, y a las franquicias, por otra. Esa oferta de 50-50 se situaría entre el 53% que pedía una parte -los jugadores- y el 47% que deseaba la otra -propietarios-. La oferta ha sido rechazada por los jugadores, según Stern. Una versión que nada tiene que ver con la ofrecida por los representantes de los jugadores, Derek Fisher y Billy Hunter, que no han confirmado la existencia de la misma.
Los jugadores han anunciado que mientras dure el cierre patronal se abrirán centros de entrenamiento en Los Ángeles, Las Vegas, Houston y, tal vez, Miami.