Luis Scola es un 'ironman'. Desde que llegara a la NBA no se ha perdido ni un solo encuentro. En las 3 temporadas anteriores, jugó los 82 de fase regular y en esta lleva disputados los 65 que ha jugado Houston. En las próximas horas, ese registro inmaculado puede romperse.
Porque después de disputar 311 encuentros consecutivos en temporada regular Luis Scola podría no jugar esta noche ante Phoenix Suns, aunque eso no es lo más importante.
Lo importante es que a lo largo del día de hoy el ala-pívot argentino tendrá que someterse a una resonancia magnética porque sintió dañada su rodilla izquierda en el choque que disputaron anoche Sacramento y Houston. En la franquicia texana, cruzan los dedos. Después de perder a Ming, perder a Scola sería tremendo.
No parece grave
En principio, los signos no son preocupantes. Todo parece indicar que Scola se retiró en el tercer cuarto del partido en prevención de que su problema con la rodilla izquierda fuera a más.
El argentino sólo jugó 17 minutos y ya ha avanzado que si no se siente mejor no jugará hoy ante los Suns de Steve Nash.
Por ahora, su equipo le ha colocado el estatus de 'day-to-day' a la espera de lo que establezca hoy la evaluación médica a la que será sometido.
Scola es un jugador vital en los Rockets, pues promedia en la presente temporada 18,5 puntos y 8,1 rebotes por partido.