Chris Bosh tiene 26 años, es una estrella de la NBA que ha disputado varias veces el All-Star, su trayectoria en la liga es intachable y aspira por primera vez al anillo enrolado en las filas de Miami, pero todas esas bondades quedaron eclipsadas anoche en el infierno que vivió en Chicago.
El ala-pívot texano protagonizó una serie inimaginable: 1 de 18 en el tiro de campo. Una serie de pesadilla, que se convierte en algo aún peor si se tiene en cuenta que se trata de un jugador interior, cuyo porcentaje, por lo tanto, se debe mover en torno al 50%.
Lo de Bosh, anoche, fue un Expediente X. Y es que pocas horas después del movido 'deadline' de este año el jugador vivía su peor jornada.
De los peores de la historia
Bosh ha pasado con lo de ayer a la historia negativa de la NBA, pues se ubica entre los 3 peores jugadores de la historia de la liga en porcentaje de tiro con 18 o más lanzamientos intentados en un mismo partido.
El peor sin discusión en esta estadística es Mike Newlin, jugador que 'logró' un 1 de 22 en la temporada 1972-1973. El segundo peor es Nate Thurmond, que en la campaña 1968-1969 se fue a un nefasto 1 de 19. Tras ellos, empatados, el Chris Bosh de anoche y Dolph Schayes en un partido de la temporada 1961-1962. Ambos con 1 de 18. Es decir, nadie tiraba tan mal en la NBA lanzando 18 tiros o más desde la campaña 1972-1973. Han pasado casi 40 años. Ya ha llovido.
La situación sorprende aún más si se tiene en cuenta que el ex de Toronto ha anotado el 49,2% de sus tiros de campo en los 563 encuentros que ha disputado hasta la fecha en temporada regular en la NBA.
Es más, en la presente campaña sus peores números se remontan a los 2 primeros partidos de la liga, cuando acababa de aterrizar en Miami (3 de 11 ante Boston y 2 de 9 ante Orlando), y el pasado 3 de febrero cuando otra vez con Orlando como rival se fue a un 3 de 12. Todo asumible. Nada que ver con la ruinosa actuación de anoche. Una noche que no olvidará fácilmente.