Alcanzada la media temporada 2010-2011 es tiempo de hacer algún que otro balance cargado ya de cierta perspectiva. Nos centramos en los jugadores y lo hacemos primeramente en aquellos que consideramos que nos han dejado las mejores vibraciones hasta el momento.
Luego, en otro documento, que publicaremos en breve, nos centraremos en aquellos que han supuesto hasta la fecha las mayores decepciones. En los dos casos, fijaremos nuestra lista en 20 deportistas. No es más que una opinión. Ya saben, para gustos colores. Cada aficionado tendrá una lista en su cabeza. Éstas son las nuestras. Su elaboración no sigue una clasificación de mejor a peor. Simplemente son los 20 que nosotros destacamos ubicados por orden alfabético.
BUENAS VIBRACIONES 2010-2011
AL HORFORD (Atlanta Hawks) (16,2 pt., 9,7 reb., 3,4 as. y 56,6% tc): Uno de los jugadores que más ha progresado, aunque su avance pueda haber pasado a muchos inadvertido. Lo ha hecho poco a poco. Desde que llegó a la NBA, ha mejorado su tiro en el rango de los 4-5 metros, ha crecido en el juego colectivo, fundamentalmente en el pase, y ha reforzado sus valores defensivos. Está haciendo una gran temporada y se ha convertido en el jugador más importante de Atlanta. De hecho, se halla entre los jugadores de la liga con mayor valoración global del juego (noveno en eficiencia con 24). Injustamente infravalorado.
AMARE STOUDEMIRE (New York Knicks) (26 pt., 9 reb. y 2,3 tp.): No es fácil aterrizar en Nueva York y liderar una franquicia caída en desgracia durante años. Stoudemire lo ha hecho. Es cierto que en sus primeros partidos tuvo todavía que tantear el terreno, pero pronto se desató y con su explosión resucitaron los Knicks. Ha callado muchas bocas que vinculaban su gran rendimiento a la compañía en la pista de Steve Nash. También es verdad que ha tenido dos facilidades para aclimatarse a Manhattan: conocía bien los sistemas del entrenador (Mike D'Antoni) y Raymond Felton, sorprendiendo a muchos, ha hecho de Nash.
EL 'BIG THREE' DE MIAMI (Miami Heat) (69,6 pt, 21,9 reb. y 13,3 as.). LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh parecía que se iban a comer el mundo desde el primer momento, pero el inicio no fue fácil. Tras perder en Boston, vinieron más derrotas y el técnico de Miami, Erik Spoelstra, estuvo en la picota. A partir de ahí, una racha brutal de resultados y adiós a las críticas. El trío estelar de Miami está funcionando muy bien. Meter casi 70 puntos por partido, capturar prácticamente 22 rebotes y ofrecer más de 13 asistencias no es ninguna tontería. El problema puede venir de la falta de acción de los hombres que les rodean.
BLAKE GRIFFIN (Los Angeles Clippers) (22,8 pt., 12,9 reb. y 3,5 as.): La mayor sensación de la temporada, el más brutal impacto para los ojos de cualquier aficionado. Va embalado hacia el trofeo de mejor novato del año y todo apunta a que puede convertirse en el primer rookie en jugar un All-Star, algo que no sucede desde que Tim Duncan debutó en la liga. Sus mates están causando sensación, pero más allá de su despliegue físico está un jugador que entiende el juego y tiene una técnica envidiable. Está yendo a más. Ha logrado 27 dobles dobles consecutivos y tiene el récord anotador de la temporada con 47 puntos. ¡Y lleva un 6 de 10 en el triple!. Parece haber olvidado su año en blanco por culpa de una grave lesión de rodilla.
DEMARCUS COUSINS (Sacramento Kings) (13 pt. y 7,7 reb. En 26,3 min.): Otro novato que está empezando a causar impacto desde su año inicial. Es cierto que está pasando más bien desapercibido, en parte por el tirón mediático de Griffin y en parte por la escasa visibilidad de su equipo, los Kings, pero no es menos cierto que es un jugador que promete, con un físico envidiable, muy fuerte, y con la cabeza bien amueblada (al menos, eso parece). Con el paso de las semanas ha ido mejorando y ha elevado su contribución al equipo. Con 2,11 y casi 123 kilos, el ex de Kentucky ha de ser un jugador poderoso en la pintura en el futuro. Deberá para ello mejorar más de un aspecto del juego. Por ahora, su porcentaje de tiro de campo es todavía demasiado bajo para un pívot (42,3%).
DERON WILLIAMS (Utah Jazz) (21,7 pt., 9,5 as., 1,2 rob. y 37,3% t3): Sin duda, uno de los mejores bases de la NBA, tal vez el mejor a día de hoy. El armador de los Jazz ha dejado atrás la vieja discusión que enfrentaba su juego con el de Chris Paul, al que ha superado, por el momento. Todavía tiene 26 años, una edad joven para un base, pero desde el principio mostró una madurez asombrosa y una constancia infatigable. Ordena, manda, tiene tiro, defiende... Un gran jugador que está haciendo una fenomenal temporada. Líder indiscutible de su equipo, la extensión de Jerry Sloan en la pista.
DERRICK ROSE (Chicago Bulls) (24,7 pt., 8 as., 4,7 reb. y 37,9% t3): Para algunos, se ha convertido en el mejor base de la NBA. No lo creemos. Tal vez sea el mejor o uno de los mejores jugadores que juegan en el puesto de base, que no es lo mismo. Lidera con espíritu dictatorial a unos notables Bulls, es el base más explosivo de la liga, el que tiene mejor uno contra uno, ha avanzado en su tiro, pero no es un base puro. En realidad, es un base con mente de escolta. Aún asi, ofrece muchos pases finales a sus compañeros, pero más a base de penetrar y dividir que en función de una concepción del juego colectivo. El ex de la Universidad de Memphis es un jugadorazo, nadie lo duda. Puro espectáculo.
GRANT HILL (Phoenix Suns) (14,7 pt, 5 reb., 2,4 as. y 50,3% tc): Grant Hill está viviendo una segunda juventud en Phoenix. Pocos jugadores han logrado en la NBA un rendimiento así a su edad, pues no hay que olvidar que tiene 38 años. Junto a Steve Nash, forma una sociedad de maravillosos 'abueletes'. Verles jugar le reconcilia a uno con la vida. Está haciendo una sobresaliente temporada. Estamos hablando de un jugador que podría haber marcado una época en la NBA, al nivel de las mejores estrellas de todos los tiempos, pero al que las lesiones casi le apartan del baloncesto. Por eso, parece un milagro verle jugar así tan cerca de los 40. Pura técnica, elegancia e inteligencia, cualidades éstas que son capaces de trascender las limitaciones físicas.
KEVIN DURANT (Oklahoma City Thunder) (28,3 pt., 6,3 reb., 2,9 as. y 1 tp): El asesino silencioso. Parece que no está, da la sensación de no hacer ningún ruido, no alimenta de forma enfermiza los titulares de los medios de comunicación... y, sin embargo, es el máximo encestador de la NBA con holgura (28,3 puntos). Durant no falla. Su envidiable técnica, la bella ejecución de su tiro, sin aspavientos, su serena forma de ver el baloncesto, llena de armonía, le acerca a jugadores como Tim Duncan o Ray Allen. Nada de chulerías de 'playground', apuesta por el baloncesto natural. Para ser líder, no hay que gritar. Ya lo demostró en Turquía con la selección de Estados Unidos. Y los Thunder no flaquean, gracias en gran parte a dos jóvenes increíbles: KD y Russell Westbrook. Por cierto, tiene sólo 22 años.
KEVIN LOVE (Minnesota Timberwolves) (21,3 pt., 15,6 reb., 43,7% t3 y 87,4% tl): Cuánta razón tenía el 42 de los Wolves en quejarse de los minutos de menos que le daba su entrenador, Kurt Rambis. Ha sido adquirir la titularidad y aumentar su presencia en la pista sinónimo de explosión sensacional de juego. En esta primera parte de la temporada ha logrado varias hazañas: es el máximo reboteador de la NBA con diferencia (15,6 capturas), logró en un partido 31 puntos y 31 rebotes (fue en noviembre ante los Knicks, un doble 30 que fue como retrotraerse a otros tiempos) y ha sido capaz de encadenar 29 dobles dobles (más aún que Griffin). Y estamos hablando de un jugador que sólo tiene 22 años (de la quinta de Durant) y que lo mismo que captura rebotes como Rodman, lanza de 3 como un alero. Una joya el ex de UCLA.
KOBE BRYANT (Los Angeles Lakers) (25 pt., 5,1 reb., 4,8 as. y 1,3 rob): Es Kobe Bryant. Sólo con decir su nombre, basta. Lo más parecido que ha habido en una cancha a Michael Jordan. El mismo que hace 5 años le metió 81 puntos a Toronto en la mayor exhibición de baloncesto que un jugador haya dado jamás en una cancha de baloncesto (olvídense del paripé Chamberlain 100). Es verdad que a veces se ofusca en los finales porque quiere resolverlo todo, pero también es verdad que con el paso de los años su juego se ha enriquecido enormemente porque ha sabido apreciar el tener a su lado a jugadores como Fisher, Gasol u Odom. Está haciendo una notable temporada el de Filadelfia, que sigue en plena forma a los 32. De hecho, mantiene sus números jugando menos minutos (33,2 hasta la fecha). Debe mejorar algo su tiro triple, que en esta campaña no está siendo demasiado brillante.
LAMARCUS ALDRIDGE (Portland Trail Blazers) (21,4 pt., 8,9 reb., 1,2 tp. y 2 as): El crecimiento de LaMarcus Aldridge se ha hecho patente en cuanto ha desaparecido de la cancha Brandon Roy. El jugador texano, que tiene todavía 25 años, ha mejorado en muchos aspectos de su juego en estos últimos años. Cada vez es mejor en el poste bajo (antes confiaba demasiado en su tiro de 4-5 metros y poco en jugar de espaldas al aro) y cada vez defiende con mayor empaque en la pintura a jugadores de poderoso físico. En las últimas semanas, se está saliendo. Incluso ha batido su mejor registro anotador en 2 ocasiones, dejándolo por ahora en 37. No se arruga en los grandes momentos.
MANU GINÓBILI (San Antonio Spurs) (18,5 pt., 3,8 reb., 4,8 as., 1,8 rob. y 88,1% en tl): ¡Qué decir de Manu Ginóbili!. Algunos le postulan ya para MVP y cierta parte de razón no les falta, porque es el mejor jugador del mejor equipo con diferencia de la liga. La temporada de los Spurs es de cine: 36 victorias en 42 partidos. Y Manu es su sumo sacerdote, toda vez que Duncan se muestra más irregular debido a los años. Por el de Bahía Blanca no parece pasar el tiempo. Vive feliz a sus 33 años siendo el hombre más resolutivo de los Spurs y siendo el más audaz en los momentos cruciales. Ha protagonizado esta temporada actuaciones inolvidables.
MONTA ELLIS (Golden State Warriors) (25,8 pt., 5,7 as., 2,2 rob. y 37,5% t3): Monta Ellis es Monta Ellis. Tiene 25 años, apenas mide 1,91 y está plagado de tatuajes. Junto a Curry forma una pareja letal. Lo suyo es jugar a la carrera, aunque también sabe hacerlo en estático, por mucho que algunos lo duden. Lleva una temporada salvaje. En un partido anotó 46 y se halla entre los máximos anotadores de la competición. A veces peca de demasiado individualista y se tira hasta las zapatillas, otras veces no (es un buen pasador cuando se lo propone). Y tiene un don especial para jugarse tiros imposibles en los segundos finales. Buena muestra de su capacidad para decidir partidos la hemos tenido en los últimos días.
NICK YOUNG (Washington Wizards) (16,5 pt., 2,8 reb. y 40,7% t3): A muchos les sorprenderá la presencia de Nick Young en esta clasificación de buenas vibraciones. Ya dijimos que no es una lista de los mejores, sino de aquellos que o bien han destacado o bien nos han sorprendido. La de Young está siendo una sorpresa muy grata. El ex de USC está logrando hacerse un hueco interesante en la liga a los 25 años (y da gusto contemplar su elegante suspensión). Le metió 43 a Sacramento el 11 de enero y ha superado los 20 puntos en 4 de sus 5 últimos encuentros, aunque el último fuera el peor de la temporada. Ha conseguido la titularidad a pulso y debería ser candidato al premio a jugador más mejorado (ha pasado de los 8,6 puntos de la pasada campaña a los 16,5 de esta).
PAU GASOL-LUIS SCOLA (Los Angeles Lakers / Houston Rockets) (18,6 pt., 10,6 reb., 3,8 as. y 1,9 tp) / (19,1 pt., 8,3 reb. y 2,4 as): Emparejamos a estos dos grandes jugadores hispanos porque han seguido una trayectoria semejante (más brillante la de Gasol, claro está). Ambos comenzaron la temporada a un nivel nunca visto. Scola sorprendió a todos con unos números fantásticos que mantiene en parte a pesar de haber bajado un poco el pistón, algo normal teniendo en cuenta que se ha tenido que multiplicar en Houston ante las ausencias de sus compañeros. Y Gasol firmó en noviembre números de leyenda de la NBA, pero luego también bajó un poco la guardia. A pesar de ello, Pau sigue siendo el segundo mejor jugador de los Lakers y el mejor de su equipo en valoración (es el cuarto mejor de la liga en eficiencia con 26,16 y eso son palabras mayores). Es el sexto mejor reboteador de la competición, el octavo taponador y ha mejorado su acierto en el tiro libre. Además, hizo un triple-doble y suma 26 dobles dobles.
RAJON RONDO (Boston Celtics) (10,5 pt., 13 as., 2,4 rob. y 51,7% tc): Tras su decepción de este verano con Estados Unidos, llegó a Boston y protagonizó uno de los inicios de temporada más impactantes que se recuerda. En los primeros partidos se situó en asistencias al nivel de los jugadores más legendarios y llegados a mitad de competición sigue arrasando en la lista de pasadores de la liga (primero con 13 asistencias de media y con una mejor marca de 24 en un partido). Además, es el segundo en robos de balón por encuentro (2,41). Cerca de cumplir los 25, el ex armador de Kentucky lidera a todo unos Celtics, el mejor equipo del Este hasta la fecha (con Garnett, Allen, Pierce, Shaq... a su mando). Eso sí, en el lado negativo, su escasa amenaza desde el triple y su desastroso porcentaje de tiros libres -47,1-.
RAYMOND FELTON (New York Knicks) (17,5 pt., 8,7 as., 1,8 rob. y 86,9% tl): Felton ha explotado a los 26 años para situarse entre los mejores bases de esta temporada y convertirse en la pieza clave junto a Stoudemire del crecimiento inesperado de los Knicks de Mike D'Antoni, donde ejerce de nuevo Nash, salvando las notables diferencias con el armador canadiense (un genio del baloncesto). La adaptación de Felton a Nueva York ha sido celérica tras pasar toda su carrera NBA en los Bobcats. Y es otro candidato a jugador con mayor progresión, pues ha pasado de 12,1 puntos con Charlotte en la última campaña a 17,5 con los Knicks.
RUSSELL WESTBROOK (Oklahoma City Thunder) (22,7 pt., 8,3 as., 5 reb., 1,9 rob): Otro base de la nueva hornada. El futuro es suyo. Westbrook, formado en UCLA, acaba de cumplir 22 años y está arrasando en compañía de Durant en los Thunder. No tiene nada que envidiar a Rondo, aunque su juego no tiene tampoco mucho que ver con el del base de los Celtics, si bien coinciden en su escaso acierto desde el triple. Westbrook es un base anotador y muy completo, que suele flirtear con el triple-doble porque rebotea muy bien. De hecho, ya ha firmado 2 en lo que va de temporada (en ese dato coincide con Rondo). Sólo les supera con 3 el inabarcable LeBron James.
ZACH RANDOLPH (Memphis Grizzlies) (20,1 pt. y 13,1 reb.): La temporada de Zach Randolph con los Grizzlies está siendo majestuosa, tal y como lo fue la campaña pasada. A ello contribuye el sentido de equipo que ha creado Lionel Hollins en torno a él y a un más maduro Rudy Gay. Además, Randolph se beneficia mucho del trabajo de Marc Gasol, bastante más generoso que él. Sea como fuere, el ala-pívot de Memphis Grizzlies dio sentido a su juego cuando llegó a Tennessee, ya que antes se hallaba más que perdido. Su juego no ha hecho más que crecer desde entonces (¡qué pocos elogios se ha llevado Hollins por todos sus logros!). Esta temporada ha tenido partidos monstruosos: 35 puntos y 17 rebotes a Sacramento, 34 y 17 a Detroit y a Phoenix, varios dobles 20... Calidad y pelea a partes iguales dan estos jugosos dividendos.