Las lesiones empiezan ya a complicar la temporada de algunos jugadores antes de haber empezado. Andrew Bynum y Kwame Brown serán 2 de los que no podrán unirse a sus compañeros en la fase de preparación. El de los Lakers podría no estar en condiciones hasta finales de noviembre.
Ha sido el propio jugador el encargado de desmentir las previsiones optimistas realizadas por su propio equipo que, a través de uno de sus portavoces, anunciaba hace unos días la ausencia del jugador en el ‘training camp’, pero se mostraba esperanzado de que, con un poco de suerte, el joven pívot de los californianos estuviera en condiciones de iniciar la temporada regular.
Mucha suerte tendría que ser esa a la vista de las palabras del propio interesado. “Lo veo más hacia finales de noviembre”, ha afirmado Bynum respecto a la fecha de su posible regreso. Unas declaraciones que reavivarán la polémica sobre por qué el pívot de los Lakers esperó al 28 de julio para pasar por el quirófano en vez de hacerlo nada más terminar la temporada.
Lo cierto es que todo apunta a que Bynum, un año más, continuará la racha de ausencias que le han hecho perderse casi un centenar de partidos de temporada regular en las últimas 3 campañas (un 40%) y obligará a redoblar sus esfuerzos a Pau Gasol ante la ausencia de recambios de garantía en el juego interior angelino.
Kwame Brown, entre 4 y 6 semanas de baja
Otro hombre alto que no podrá participar con sus compañeros en el mes de preparación será el pívot de los Bobcats Kwame Brown. Una severo esguince en el tobillo izquierdo le obligará a descansar entre 4 y 6 semanas, por lo que casi con toda probabilidad no llegará a tiempo para recuperarse antes del inicio de la temporada regular.
Brown, uno de los más decepcionantes números 1 del draft de la última década, firmó el pasado mes un contrato por un año y el mínimo salarial con los Bobcats, cuyo actual propietario, el mítico Michael Jordan, fue precisamente el principal responsable de su elección como número 1 del draft por los Wizards en 2001.