Parker, Duncan y Ginóbili volvieron a ejercer, cada uno a su manera, de anclas para asegurar una difícil victoria de los Spurs en Indiana. Mientras, Memphis ganaba en la prórroga en Toronto con buen partido de Marc Gasol y estupendo de Calderón, que metió a los suyos en el choque.
Sin Calderón, el final emocionante vivido en Ontario no hubiera sido posible. El equipo bajo la dirección de Jarret Jack, que esta vez no estuvo fino, recibió un -25 y con el extremeño en pista logró un +18. Sobran las palabras.
Al final, Mayo y Gay decidieron la contienda y devolvieron a Memphis a la senda del triunfo.
Un triunfo que no siempre es fácil, si no que se lo digan a San Antonio, que las pasó canutas ante los Paceres. Ginóbili hizo un partido muy completo, anotó 18 tantos y sumó los 4 finales de su equipo.
En Washington, ya sin 'big three', los Wizards ganaron fácil a los Timberwolves con presencia más destacada de los habitual de Oberto, aprovechando la coyuntura de los cambios de jugadores. El argentino disputó 14 minutos.
Indiana 87 San Antonio 90
Defensivo, igualado, irregular, exigente, complicado... póngale ustedes el calificativo que prefieran, porque eso y más fue el partido que los Spurs disputaron anoche en el Conseco Fieldhouse, un encuentro que se le atragantó al equipo texano más de lo deseado y que no se decidió hasta el último suspiro.
También podríamos añadirle otra palabra a la definición del choque: increíble. Porque no hay otra palabra para explicar cómo un equipo es capaz de ganar un partido anotando el 35% de sus tiros.
Ganaron los Spurs y toda la 'culpa' del triunfo la tuvo su trío estelar, que decidió el partido, aunque cada uno a su manera. Porque el resto de compañeros no pasaron de complementos menores y algunos, como Blair (5 faltas personales en 10 minutos), ni eso.
Tony Parker fue la referencia ofensiva de los de Popovich. Regresado de unos días de vacaciones, al base galo se le vio una frescura renovada. Anotó 28 puntos, aunque no anduvo muy generoso en el pase final (20 tiros a canasta y sólo 1 asistencia). Pero más extremo fue el partido de Tim Duncan, que sólo hizo 8 puntos con ¡4 de 23 tiros de campo!, un auténtico desastre que compensó con ¡26 rebotes!. Además, fue Duncan el que decidió el partido en compañía de Ginóbili.
Porque Gino hizo un partidazo. El jugador de Bahía Blanca puso el equilibrio que no fueron capaces de poner Parker y Duncan. El suyo fue un gran partido en todos los aspectos. Hizo 18 puntos, capturó 6 rebotes, repartió 7 asistencias y anotó 7 de sus 14 intentos en 31 intensos minutos.
Los Spurs fueron capaces de presentarse en el final del partido con opciones gracias a su agresividad en el rebote y ya llegado a ese punto, demostraron su experiencia y calidad.
Con 82-85 en el marcador, Manu Ginóbili puso los cimientos de la victoria al anotar 5 puntos en medio minuto de juego y dejar el marcador en 84-90 a 1:15 del final. Fueron un 2 más 1 seguido de un tiro exterior las jugadas que dejaron a Manu como protagonista de la noche, aunque luego no fuera capaz de rematarlo.
Porque a 37 segundos del final el argentino erró un triple exterminador, que hubiera dado por terminado el encuentro, y a 7 segundos para la conclusión fue taponado por Hibbert cuando se disponía igualmente a aniquilar al rival. Fue ahí donde surgió Duncan, al atrapar primero el balón rebotado del tapón y al hacerse unos segundos después con otro rebote ofensivo que no permitió a los locales intentar el triple del empate.
Pese a esos dos fallos finales, nada hay que achacar a Ginóbili, que se la jugó con todas las consecuencias y en unas ocasiones acertó y en otras no. No hay que culparle de esos fallos porque su determinación y la inteligencia de Duncan le dieron la victoria a los de Popovich.
En los Pacers, Granger logró 23 puntos y 8 rebotes, Roy Hibbert se fue a 14 tantos, 7 rebotes y 6 tapones y T.J.Ford aportó otros 14 en 24 minutos. Troy Murphy capturó 16 rebotes y Watson proporcionó 8 asistencias.
Toronto 102 Memphis 109 (tras prórroga)
Memphis retornó al triunfo, aunque tuvo que ir a una prórroga para lograrlo. Fue en un partido que enfrentó a dos internacionales españoles: el local José Manuel Calderón y el visitante Marc Gasol.
Ambos jugaron minutos y lo hicieron con muchísima solvencia, si bien fue Calderón mucho más protagonista del partido, pues sin él los Raptors nunca hubieran llegado tan lejos.
El inicio del partido resultó demoledor para el conjunto canadiense. Un 0-13 inicial con exhibición de Zach Randolph y compañía y Toronto, con su camiseta de los Huskies, se vio superado de forma brutal hasta cerrarse el cuarto con un contundente 16 a 28 debido a que Randolph, Mayo y Gay camparon a sus anchas para sumar 23 de esos 28 tantos.
Fue la salida de Calderón bien avanzado el primer cuarto la que catapultó a los suyos. La salida de Calde y también de sus compañeros de la segunda unidad, que ayer dieron toda una lección de juego a una primera unidad cabizbaja en la que Jack estuvo gris y Turkoglu simplemente desastroso.
Los suplentes de Toronto sumaron en el partido 43 puntos por 9 tantos anotados de los suplentes rivales (¡qué cruz la segunda unidad de los Grizzlies!). Amir Johnson hizo 10 puntos y 3 tapones, Sonny Weems logró otros 10 y Calderón se marcó un señor partido que le llevó a jugar 35 minutos por 18 que jugó Jack. El extremeño terminó con 12 puntos, 9 asistencias, 6 rebotes y 2 de 4 triples. El armador español fue capaz de dar pausa, equilibrio, ritmo de juego y conocimiento al juego local. Fue todo un revulsivo.
Los parciales con ellos en cancha lo dicen todo. Con Johnson un +27 y con Calderón y Weems un +18.
Los suplentes llevaron el equilibrio al partido y la igualdad persistió hasta el final, pero no hay que pasar por alto que el que sostuvo el juego canadiense fue otra vez Bosh (32 puntos y 10 rebotes, con 10 de 10 en el tiro libre).
El inicio del tercer cuarto reveló otra vez los males de la primera unidad. Memphis abrió hueco y tuvo que salir otra vez Calderón, que ya no abandonó ni un solo segundo la cancha.
En la recta final, nuevo tirón de los Raptors que se van de 6 (93-87) con Bosh y Calderón encendidos, pero Memphis remonta a un 93-92. Sin embargo, Toronto alcanza los últimos segundos 5 puntos arriba y con medio partido ganado. Entonces, Mayo anota un triple salvador (97-95), los de Triano fallan la siguiente jugada y Randolph, en un contraataque empata el encuentro a 97 a 1,7 segundos del final. El Air Canada Centre queda helado.
En la prórroga, los Grizzlies, con Gay como figura, se llevan el partido ante unos Raptors erráticos en el triple (3 de 17).
Gay, con 29 puntos y 8 rebotes, lidera a los visitantes, seguido de Randolph (24 tantos, 11 rebotes y 5 asistencias) y Mayo (22 con 8 rebotes y 4 de 6 triples). Los otros dos titulares también cumplen de sobra. Conley aporta 13 puntos, 8 asistencias y 7 rebotes y Marc Gasol se va a otro doble doble: 12 puntos, 10 rebotes y 2 tapones en 43 minutos de juego en los que sólo tiro 6 veces a canasta, aunque se fue en 10 ocasiones a la línea de tiros libres.
Washington 108 Minnesota 99
Ganaron los Wizards sin 'big three'. Sancionado Arenas y traspasados Butler y Jamison, fue una suerte para los locales encontrarse anoche con unos Timberwolves que no levantan cabeza.
Fabricio Oberto aprovechó la coyuntura propiciada por los movimientos de jugadores. Haywood se ha marchado e Ilgauskas aún no ha llegado. Una espera que sirvió al argentino para hacerse un hueco de 14 minutos en la rotación de Flip Saunders. Y el pívot cordobés se comportó bien, por encima de lo que viene siendo habitual en una temporada gris, ya que aportó un mínimo en todas las facetas del juego: 2 puntos, 4 rebotes, 1 tapón, 2 asistencias y 1 robo.
Pero los que se aprovecharon de verdad fueron los dos hombres altos del equipo que partieron de la titularidad. Blatche estuvo inmenso con 33 puntos y 13 rebotes y McGee se fue a 14 con 11 rebotes y 5 tapones.
Mike Miller, mientras, puso la calidad en el perímetro (17 puntos con 5 triples sin fallo). Y debutaron los 3 hombres venidos de Dallas. Josh Howard hizo 14 puntos en 27 minutos; James Singleton logró 6 en 23; y Quinton Ross disputó 11 minutos.
Minnesota demostró que ni es todavía un equipo ni está en la línea de serlo. Jefferson hizo 18 puntos, Gomes 16 y Flynn 15, aunque el mejor volvió a ser un estupendo Kevin Love con 13 puntos y 13 rebotes. Pero los Wolves, sin demasiada química, siguen en las profundidades.