En su cuarto año universitario el español Sergio Olmos vivió su gran partido. Y es que, acostumbrado a hacer labores más oscuras dentro del juego de la Universidad de Temple, el pívot valenciano brilló en todas las facetas del juego en la victoria de su equipo ante Tennessee.
El fin de semana resultó redondo para Olmos. No todos los días se gana a una universidad del máximo nivel –Tennessee es la octava del ranking nacional-, y además de modo holgado (88-72). Ni todos los días un jugador que pasa habitualmente desapercibido en la liga universitaria ve cómo tantas miradas y tantos ‘flashes’ se clavan en él.
Olmos batió su mejor registro anotador con 19 puntos, pero es que además aportó 7 rebotes, 5 tapones y 3 asistencias. Anotó 6 de sus 9 tiros de 2 e incluso se atrevió a lanzar un triple, que erró. Y en los tiros libres, una faceta que no domina, se fue a 7 de 8. Jugó 39 minutos, lo que habla bien a las claras del gran peso que tuvo en la victoria de Temple.
Fueron Olmos y Ryan Brooks (16 puntos y 10 rebotes) los grandes complementos de la gran estrella del equipo, Dionte Christmas, un francotirador que endosó a Tennessee 35 puntos en 32 minutos con 7 triples de 14 intentos.
Gran expectación
Lo mejor para Sergio Olmos es que su gran actuación coincidió con un partido de máxima expectación. El Liacouras Center de Filadelfia estaba lleno de espectadores, había en sus gradas un ejército de ojeadores de la NBA y el partido se retransmitía por televisión para todo Estados Unidos.
En ese marco incomparable, el pívot español de 2,13 de altura, que ya es senior porque está en su cuarta y última temporada universitaria, cumplió uno de sus sueños: ser una pieza importante en un equipo importante. Y es que Temple, que infligió su segunda derrota de la temporada a Tennessee, lleva un balance de 5 victorias y 3 derrotas en el arranque de la competición.
Un enorme partido
No pudo elegir Olmos mejor escaparate para elevar sus números, que en la presente temporada se cifran en 12,8 puntos y 4,5 rebotes en 29 minutos de juego. Ha disputado hasta la fecha 4 de los 8 partidos que ha jugado Temple y suma un 57,9% en el tiro de campo.
“Es un partido enorme”, acertó a decir el jugador español tras la victoria de Temple. Olmos reconoció a la conclusión del encuentro su enorme satisfacción y su sentimiento de que había vivido algo sensacional: “Sentía cómo podía saltar más de lo que nunca pude hacerlo”, dijo eufórico el jugador hispano.