El hasta hace poco escolta de los Clippers y ahora no se sabe muy bien si jugador de los Knicks, Cuttino Mobley, podría optar por retirarse de la práctica del baloncesto, según informa The New York Post. El jugador está pendiente de un último examen médico que ha de pasar hoy en Minnesota.
Mobley, de 33 años, no ha pasado los exámenes médicos obligatorios tras entrar en la operación de traspaso que llevó a Zach Randolph a los Clippers. La causa es una cardiomegalia (un agrandamiento excesivo del corazón que dificulta su funcionamiento) que, al parecer, ya le había sido detectada hace años y que ahora podría haberse agravado.
Ese agravamiento de su dolencia desaconsejaría que Mobley siguiera en la práctica profesional del baloncesto. Si las últimas pruebas no cambian el diagnóstico establecido en las primeras, el jugador podría recibir el retiro por causas médicas.
Eso le garantizaría cobrar los 18,9 millones de dólares restantes de su contrato (le queda este año y otro más) y, al mismo tiempo, permitiría a los Knicks, según el Post, ahorrarse cerca del 75% de esa cantidad, ya que la compañía aseguradora se haría cargo de ese porcentaje.
Fuentes cercanas al jugador han afirmado que ahora mismo “no está pensando en el baloncesto, su principal preocupación es su salud”.