Los Knicks parecen decididos a resolver el futuro de Marbury en la franquicia o más bien la falta de él. Así lo aseguró ayer el general manager del equipo, Donnie Walsh, quien afirmó que dedicaría los dos próximos días a intentar buscar una solución para la salida de Marbury del equipo, una vez que su entrenador, Mike D’Antoni, ha descartado contar con él para la presente temporada.
Walsh se reunirá en ese tiempo tanto con el técnico como con el propio jugador para recabar sus respectivas impresiones y tratar de llegar a un acuerdo para el que Walsh afirma que “no hay muchas opciones”. El dueño del equipo, James Dolan, también tendrá sin duda algo que decir, dado el montante de dinero que hay en juego.
Los Knicks son poco partidarios de rescindir el contrato del jugador abonándole los casi 22 millones de dólares que Marbury tiene garantizados esta temporada, pero puede que se vean abocados a ello como única salida. Un posible traspaso parece complicado a estas alturas y los Knicks tampoco quieren asumir contratos, a cambio del base, que comprometan la tan deseada liquidez financiera de cara al verano de 2010.
Lo que está claro es que los de Nueva York quieren reconstruirse y para ello deshacerse de Marbury, que los 2 últimos partidos ha permanecido en la lista de inactivos, parece básico. “Estamos intentando navegar por unas aguas que no hemos enturbiado nosotros, ya estaban turbias”, sentencia D’Antoni.