El español Pau Gasol vivió una experiencia muy distinta a las tres series de playoff vividas en su día con Memphis Grizzlies. Ésta vez fueron él y su equipo, los Lakers de Los Angeles, los que impusieron la ley del más fuerte y tras ganar a Denver por 101-107 se convirtieron en el único equipo que va a superar la primera ronda barriendo a su rival por 4-0.
El jugador catalán se convirtió en el primer español que pasa una primera ronda del playoff, aunque está destinado este año y en los próximos a hacer más historia patria. Su aportación en el último partido de la serie fue importante (21 puntos, 7 rebotes, 4 tapones, 4 asistencias y ninguna pérdida de balón en 38 minutos), al igual que lo ha sido en todos los encuentros de la eliminatoria, ya que ha concluido los 4 partidos con unos promedios de 22,7 puntos, 9 rebotes, 5 asistencias y 3,8 tapones.
Pero centrándonos en el último envite, hay que decir que, al menos, el equipo de George Karl supo caer con dignidad y en el último partido plantó seria resistencia a los californianos, que tuvieron que confiar en los últimos minutos en la versión más galáctica de Kobe Bryant, el mejor jugador, sin duda, de la actual NBA.
El escolta de Filadelfia -que anotó 31 puntos, atrapó 7 rebotes y repartió 6 asistencias- , guardó lo mejor para el final, como han solido hacer siempre los mejores de la historia. Su actuación en los últimos minutos del partido resultó conmovedora para los amantes de la estética, pero es que además de estar cargada de plasticidad anduvo sobrada de efectividad, ya que otorgó la victoria a su equipo. Y es que Kobe anotó la friolera de 14 puntos en los últimos cinco minutos y medio del encuentro (y eso que falló 4 tiros libres). Lo suyo fue, simplemente, algo de otro planeta.
Es cierto que este tipo de exhibiciones, tan del gusto del espectador, pueden generar cierto escepticismo sobre la capacidad de un equipo a la hora de resolver partidos. No parece de recibo que un equipazo como los Lakers lo fíe todo a su gran estrella. Pero no hay que equivocarse, pues cuando sus compañeros tuvieron que aparecer puntualmente demostraron que también saben resolver.
Fue el caso de Luke Walton cuando encestó un importante triple en la parte final del partido, colocando el marcador en 98-103. Y también el de Odom y Gasol a la hora de fabricar junto a Bryant la canasta que acabó con la oposición de los Nuggets. Esa jugada fue una oda al baloncesto por parte de los tres jugadores esenciales del equipo angelino: Bryant se la pasó a Odom y éste hizo un pase extra para que Gasol se colgara del aro. La canasta del jugador español puso el luminoso en 101-105 a falta de 22 segundos y decidió prácticamente el encuentro y la serie eliminatoria. Una decisión que adquirió carácter inamovible cuando en la siguiente jugada Bryant robó el balón a Nené Hilario.
Así se decidió el partido, que se decantó del lado californiano porque los Lakers tienen en sus filas a Bryant y porque su plantilla está compuesta por jugadores muy inteligentes (Gasol, Walton, Odom, Fisher...). Ésa fue, tal vez, la diferencia con respecto a los Nuggets, un equipo lleno de talento, sobrado de físico y falto de capacidad de discernimiento y agudeza mental en muchos de sus hombres (Carmelo Anthony, Kenyon Martin, Nené, que anoche hizo 6 personales en 11 minutos...). De este modo, mientras que el conjunto de Phil Jackson jugó los momentos decisivos con bastante cabeza, el de George Karl terminó desestructurado. Con Anthony y Martin eliminados por hacer faltas absolutamente irracionales, con Camby anotando su única canasta de todo el partido acudiendo a la línea de 3, y en un momento decisivo, y con Nené Hilario botando el balón a 8 metros del aro en busca de J.R.Smith, lo que acabó con el robo de la pelota por parte de Bryant a 18 segundos del final.
Dominio de los Lakers al descanso
Los dos primeros cuartos fueron de los Lakers, que jugaron a muy alto nivel, sobre todo en ataque. Se llegó al descanso con 54-64 en el marcador y dos jugadores estelares en el equipo visitante: Gasol y Bryant.
El ala-pívot de Sant Boi anotó la última canasta del segundo cuarto sobre la bocina para alcanzar los vestuarios con 18 puntos y 6 rebotes en 18 minutos de juego. Su aportación en general ha sido muy importante en toda la serie y su único lunar ha estado en las dos segundas partes de los dos últimos partidos, en las que ha anotado tan solo 4 puntos tras completar grandes primeras partes.
En cuanto a Kobe, llegó al ecuador del partido con 15 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias, pero, a diferencia de Pau, dejó lo mejor para el final, como ya hemos dicho.
Los angelinos dominaron la primera mitad a pesar de los problemas de personales de Luke Walton, un hombre que está rindiendo de maravilla en los playoffs. Sin embargo, su dominio tuvo luces y sombras. Las luces procedieron de un primer cuarto muy bueno que desembocó en un segundo acto en el que llegaron a dominar por 13 puntos (23-36). Y las sombras se cernieron sobre el equipo cuando en el segundo cuarto se dejaron remontar, en un momento dado, parte de la ventaja tras recibir 16 puntos seguidos en la pintura, lo que denota la falta de espíritu defensivo en esos momentos del equipo. Fue entonces, cuando el partido se convirtió en un correcalles bastante indecoroso, cuando los locales sacaron mayor tajada en el marcador, porque ese tipo de caos le va muy bien a un conjunto anárquico como es el de Colorado.
A pesar de todo, el conjunto de Hollywood llegó bien situado al descanso, gracias, en gran parte, a su gran control del juego, incluso en los momentos de máxima celeridad, ya que sólo perdió 3 balones en los primeros 24 minutos.
Denver resurge en el tercer cuarto
Denver resurgió en la reanudación. Es curioso, cuando los Nuggets se vieron ya al borde de la eliminación sacaron a relucir un arma que no han utilizado en toda la temporada: la defensa. Y uno se pregunta, si en el tercer cuarto Denver dejó a los Lakers en 15 puntos a base de actitud defensiva, ¿por qué este equipo no ha recurrido a ese camino más veces durante la fase regular?. La respuesta puede hallarse, tal vez, en la composición de su plantilla. Salvo el mexicano Nájera, el brasileño Nené y, a veces, Kenyon Martin, éste es un equipo integrado por jugadores a los que les cuesta ponerse el mono de trabajo.
Ese tercer cuarto fue sorprendente. Mediado el cuarto los locales habían tirado 15 veces a canasta y los visitantes 6. El equipo de Jackson recibió un parcial en los primeros 6 mnutos de 9-2. Una canasta en medio cuarto. Menos mal que Radmanovic salió al rescate con 8 puntos.
A partir de entonces todo fue igualdad, hasta que llegó el final ya narrado, donde los Lakers demostraron su calidad individual y colectiva.
Por el equipo local, a parte de Bryant y Gasol, destacó Lamar Odom, que hizo 14 puntos, 12 rebotes y 4 asistencias, así como los buenos momentos de Radmanovic en el tercer cuarto.
En Denver, el mejor, de largo, fue J.R.Smith, que brindó momentos de gran baloncesto que hicieron vibrar a la grada del Pepsi Center. J.R. se fue hasta los 26 puntos en 31 minutos, estuvo brillante en los momentos importantes y a pesar de su juego explosivo sólo perdió 1 balón. Se trata de un extraordinario jugador que, tal vez, debería de haber dispuesto de más minutos esta temporada.
Mientras, Iverson logró 21 puntos, aunque sólo dio 2 asistencias, Anthony hizo 21 puntos y 11 rebotes y Camby atrapó 17 rebotes y puso 4 tapones, si bien en los últimos dos partidos sólo anotó 3 puntos, que procedieron, aunque parezca increíble, de 1 triple.
El mexicano Eduardo Nájera tuvo una actuación bastante aceptable. Jugó 16 minutos en los que anotó sus dos tiros, terminando con 4 puntos. Su labor defensiva siempre es importante y muchos de sus compañeros podrían tomar nota de su actitud en el campo, una actitud intachable.
Los Lakers cerraron con la victoria de anoche una actuación redonda ante Denver esta temporada. Han jugado 7 veces y todos los partidos los han ganado los angelinos, que con Gasol en la pista han vencido en 25 de los 30 partidos que han disputado.
Mientras, los Nuggets finalizan la temporada un poco frustrados. Pero esta eliminación no ha de restar perspectiva a lo que han logrado esta temporada. Alcanzaron las 50 victorias, algo que no conseguían desde hace dos décadas.
Denver Nuggets 101 Los Angeles Lakers 107 (0-4)DENVER: Iverson (22), Anthony (21), Kleiza (8), Martin (8), Camby (3) -cinco inicial- Smith (26), Carter (2), Nájera (4), Nené (7) y Diawara. |
L.A. LAKERS: Fisher (7), Bryant (31), Radmanovic (12), Odom (14), Gasol (21) -cinco inicial- Walton (7), Vujacic (5), Farmar (6) y Mbenga (4). |
Parciales: 23-32, 31-32, 23-15 y 24-28. |