JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2008-2009
Memphis gana a Toronto en un partido marcado por los errores
Calderón fue el mejor Raptor con 18 puntos y Marc Gasol acabó con 8 tantos y 8 rebotes
Houston vence con toda su artillería pesada y Scola aporta 8 puntos y 10 rebotes
Duelo español en el FedExForum de Memphis. Se enfrentaban Memphis y Toronto, dos equipos que demostraron el porqué se hallan en posiciones tan retrasadas en la competición. Ganaron los menos malos, los Grizzlies, y Calderón y Marc Gasol hicieron buenos partidos.
Calderón fue el mejor de los canadienses con 18 puntos, aunque estuvo acorde con el partido y se quedó en un 5 de 15 en el tiro de campo, ya que tuvo que asumir más tiros y seleccionar peor sus posiciones ante la ausencia de Bosh. Gasol fue una bella excepción en el encuentro. Encestó todos sus lanzamientos, 4, y acabó con 8 puntos, 8 rebotes y 3 robos a pesar de sólo jugar 19 minutos. La estrella del encuentro, el hombre decisivo 100%, fue O.J.Mayo. Tremendos sus minutos finales.
Mientras eso sucedía en el estado de Elvis, en Texas los Rockets acudieron por fin a un partido con toda su artillería pesada... y ganaron. Lo hicieron a pesar de la brutal oposición de Al Jefferson, que dio a Minnesota 36 puntos y 22 rebotes.
Luis Scola, como Gasol, jugó poco, también 19 minutos. Los aprovechó, sin embargo, bastante bien: 8 puntos y 10 rebotes. La conjunción de todos -Ming, Alston, McGrady, Artest, Scola...- dio un triunfo a unos Houston que no están acostumbrados, desafortunadamene, a disponer de todas sus estrellas por culpa de las continuas lesiones.
Memphis 78 Toronto 70
El resultado lo dice todo. No fue la alegría de la huerta este partido. Noches como esta no revientan taquillas venideras ni animan a abonarse al equipo al aficionado. Porque a ese marcador escueto, triste, escaso de espectáculo, no se llegó por la vía de las defensas intratables, el juego de exquisita y prolongada circulación... se llegó por la desatinada noche de ambos equipos en el tiro.
Un horror. Así se puede definir en una palabra la errática jornada de unos y otros, su escasísima puntería. Tal fue así que el 38,5% en el tiro de campo con el que acabó Memphis le hizo acreedor a la victoria, pues fue infinitamente superior al lamentabilísimo y poco común 29,5% que firmaron unos Raptors que sin Bosh rozaron el ridículo.
Sólo Calderón, Graham y Kapono pusieron un poquito de cordura en un equipo marcado por el desaliento, una profunda depresión que se agudizó, y mucho, cuando Colangelo decidió prescindir de Sam Mitchell, un entrenador con el que los canadienses rozaban el 50% de victorias. Pasado un tiempo razonable aquella decisión de los despachos se torna insufrible. Los números cantan. A día de hoy Toronto suma 19 victorias y 34 derrotas. Ya encadenas 6 partidos perdidos consecutivos. De seguir así, hasta Memphis podría completar una mejor temporada que el equipo de Calderón.
Muy distinta tendencia empieza a marcar Memphis, que ha ganado 3 de sus últimos 4 partidos, los 3 en los que ha demostrado una interesante progresión en materia defensiva. Y eso que anoche no pudo contar con su teórica estrella Rudy Gay, con el base suplente Kyle Lowry y con un jugador novato como Darrell Arthur que se encontraba en fase emergente.
El partido ponía frente a frente en la pista a dos internacionales españoles, Marc Gasol y José Manuel Calderón, que fueron de lo mejor del partido y abandonaron el FedExForum con muy distintas caras.
El mediano de los Gasol ha perdido un poco de tiempo en pista con la recuperación física de Darko Milicic, pero sigue rindiendo a gran nivel. Ante Toronto se puso con problemas serios de faltas en el segundo cuarto, lo que limitó aún más sus minutos. Pero el tiempo que estuvo, estuvo: 8 puntos, 8 rebotes y 3 robos en 19 minutos sin fallo alguno en el tiro.
Su compatriota Calderón parece estar ya prácticamente recuperado de su recaída muscular. Ante la ausencia de Chris Bosh tuvo que encarar más el aro, asumir más responsabilidades ofensivas a nivel anotador y olvidarse un poco de dirigir con mano firme al equipo. Esto trajo como consecuencia que se convirtiera en el máximo realizador de Toronto con 18 puntos, pero por contra lastró las opciones ofensivas de otros jugadores y la capacidad solidaria de la ofensiva canadiense, que acabó el partido con 12 míseras asistencias.
Pero estando bien ambos españoles, como lo estuvieron Mike Conley y Hakim Warrick en los locales -excelentes los 2-, hay que decir que el partido tuvo un nombre, y ese nombre fue el de O.J.Mayo, un magistral novato que se vistió de hombre de los pies a la cabeza en el cuarto período.
Mayo arrastraba una mala noche hasta que irrumpió en el final del encuentro y se lo llevó todo por delante. Su equipo perdía 60-62 a falta de 9:19 para el final. Fue entonces cuando los Grizzlies encadenaron en algo más de 5 minutos un parcial de 11-0. Mientras el ataque de Toronto se venía abajo de forma incomprensible, algo tuvo que ver también la buena tarea defensiva local, Mayo anotaba 9 puntos consecutivos y cerraba el parcial con una fantástica conexión con Marc Gasol, que resolvió el catalán con maestría en la zona.
Ese 11-0 parecía capital y lo fue en parte, ya que obligó a un esfuerzo extraordinario de los Raptors para remontar. Un triple de Kapono a 48 segundos de la conclusión volvió a dar esperanzas a Calderón y compañía (73-70). Pero ahí surgió de nuevo la figura estelar de Mayo, que respondió a ese triple con otro y mató el deseo de victoria de su rival (76-70). El escolta novato acabó con 16 puntos, pero 12 de esos tantos los metió en los últimos 9 minutos del partido.
Mientras, en el bando contrario, Triano y sus jugadores se quedaban nuevamente en la cuneta en los minutos finales de un partido. Las desastrosas actuaciones de Bargnani, O'Neal y Parker pesaron mucho en ese desenlace.
Los números:
- Memphis: Mayo 16 pt y 8 reb (6 de 19 tc); Warrick 16 pt, 8 reb y 3 as; Conley 15 pt, 8 as y 6 reb.
- Toronto: Calderón 18 pt y 5 as (7 de 7 tl); Graham 14 pt; Kapono 4 de 11 tr.
- Bargnani, O'Neal y Parker sumaron 18 puntos con 5 de 30 en el tiro de campo.
- Toronto anota el 29,5% de sus tiros y pierde su sexto encuentro consecutivo.
- Los Raptors anotaron su primer triple -obra de Calderón- tras errar sus primeros 13 intentos.
- 5 jugadores de Memphis atraparon 8 rebotes.
Houston 107 Minnesota 90
Al igual que Marc Gasol en Memphis, el argentino Luis Scola fue titular en Houston, jugó poco, pero rindió como el que más en el corto minutaje del que dispuso -19-. Es cierto que no tuvo una noche afortunada en el tiro -3 de 10 en el doble-, pero es igualmente veraz que su comportamiento bajo los tableros fue ejemplar, pues atrapó 10 rebotes en un abrir y cerrar de ojos.
El problema para él, como jugador interior que es, fue la imposibilidad de lograr un reto en principio complicado que con el transcurso de los minutos se fue transformando en amarga pesadilla: detener a Al Jefferson.
Jefferson dio ayer sobrados motivos a todos aquellos que critican con dureza su no selección para el All Star, un olvido que tiene mucho que ver con el escaso glamour de su equipo, los Wolves. Y es que el pívot visitante arrasó de un modo llamativo al chino Yao Ming, que por lo menos supo plantear un duelo interesante en el terreno
anotador.
Hasta 17 puntos y 8 rebotes hizo Jefferson en el primer cuarto para terminar el encuentro con unos increíbles 36 tantos, 22 rebotes, 4 asistencias, 4 robos de balón y 2 tapones. Números de megacrack. Tras él, tras su incesante productividad, no hubo casi nada en Minnesota. Tal vez Sebastian Telfair (13 puntos y 9 asistencias), el trabajo de Kevin Love en los tableros y destellos de Ryan Gomes llegados con cuentagotas. Poco más.
Houston fue otra cosa. Por fin, Rick Adelman pudo contar con toda su artillería pesada. En el vestuario, el técnico del equipo texano pudo trazar tácticas con todos, con Scola y Ming, sí, pero también con Artest y McGrady. Todos juntos, todos vestidos de corto.
Yao sufrió defensivamente muchísimo ante Jefferson, que le sacó de sitio habitualmente para aprovechar su mayor movilidad, pero a cambio hizo también bastante daño ofensivamente a Minnesota. Acabó el gigante chino con 30 puntos y 5 tapones, siendo el agente principal del triunfo junto a un gran Rafer Alston (22 puntos y 4 de 4 en triples).
Fueron ellos dos, Ming y Alston, los que revolucionaron el partido en los minutos en los que Houston resolvió el mismo, los últimos del tercer acto y los iniciales del cuarto. Unos minutos en los que un parcial de 17-2 hizo que el luminoso pasase de 66-69 favorable a los Timberwolves a 83-71 a favor de los locales. 14 de esos 17 puntos llevaron la rúbrica del base -8 con 2 triples- y el pívot -6-.
Hasta ese espectacular tirón, Minnesota había maniobrado a gran nivel, a pesar de la nefasta noche de Randy Foye y la incapacidad para participar activamente en el juego del equipo de Miller y McCants.
Pero fueron esos minutos decisivos los que cargaron de razones el actual abismo que separa a estos dos equipos. Porque los Rockets pudieron ser por fin un equipo con todas sus piezas, un equipo que defendió de forma notable en la segunda parte y en el que también aportaron su granito de arena en la ofensiva McGrady -15 puntos-, Artest -14-, Landry o Battier. Felices noticias para Adelman.
Los números:
- Houston: Ming 30 pt y 5 tp; Alston 22 pt y 6 as (8 de 10 tc con 4 de 4 tr); Artest 14 pt, 7 reb y 6 as.
- Minnesota: Jefferson 36 pt, 22 reb, 4 as y 4 rob; Telfair 13 pt y 9 as.
- Los visitantes sólo anotaron un 39,8% en el tiro de campo.
- 52 puntos metieron en la pintura los Rockets por sólo 30 los Wolves.