Minnesota Timberwolves remontó una desvantaja de 22 puntos ante los Clippers para ganar 100-118 en L.A. con 37 puntos de un gran Anthony Edwards. Todo ello en un partido accidentado, con lesiones estelares del local Kawhi Leonard y del visitante Rudy Gobert.
Kawhi Leonard jugó entero el primer cuarto y ya no volvió a pisar la pista. Se le vio abandonando el pabellón cuando se estaba jugando el segundo cuarto. La lesión se localiza en la espalda. Jugó 12 minutos en los que metió 6 puntos y su equipo dominó el partido (34-21 en el primer cuarto). Luego la cosa cambiaría.
Rudy Gobert se pegó un señor costalazo en el último cuarto en una jugada con Ivica Zubac. Se echaba la mano al pecho. Siguió jugando un poco pero a 7:18 del final enfiló el camino de los vestuarios tras haber anotado 8 puntos y capturado 11 rebotes. Tiene pinta de que podría ser una lesión costal. Habrá que esperar.
El jugador del partido, más allá de las lesiones, no fue otro que Anthony Edwards, que acabó con 37 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias tras asumir 29 tiros, estar por encima del 50% de efectividad de cara al aro y hacer su equipo un +22 en el marcador con él en juego.
Sus mejores socios fueron un tremendo Nickeil Alexander-Walker, que se fue a 28 puntos desde la suplencia mostrándose prácticamente infalible en el tiro y un gran Mike Conley, que encestó 23 puntos. Enchufó 5 triples.
Volvieron al juego Kyle Anderson, que lo hizo bien, y el citado Gobert, que terminó lesionado. Ambos fueron titulares.
Con el triunfo, Minnesota evitó la que hubiera sido su peor racha de resultados de la temporada, ya que si hubiera perdido hubiera acumulado 3 derrotas consecutivas. Y le encaja un 3-1 en la campaña a Clippers tras sus 4 duelos particulares.
Tras un gran primer cuarto, Clippers llegó a ponerse con 22 de ventaja (57-35) jugándose el segundo cuarto, pero luego desfalleció. La baja de Kawhi tuvo su peso en ese gran bajón.
A Clippers le pesaron tanto su horrible labor a la hora de cerrar el rebote, como sus numerosas perdidas de balón. Y, claro está, su pésima ofensiva tras el descanso: ¡solo anotó 37 puntos en la segunda mitad!
Paul George, con 22 puntos, fue el único jugador local que se mostró constante en ataque. Ni funcionó James Harden -otro gris partido con 12 puntos y 7 asistencias- ni lo hizo como sexto hombre Norman Powell, apagado en ataque.
Tras el partido, Timberwolves es tercero del Oeste con 45-21, por el 45-20 de los colíderes Thunder y Nuggets; y Clippers es cuarto con 41-23.