Minnesota Timberwolves no falló ante unos Lakers sin LeBron James. Triunfo por 118-111 para ponerse con 21-6, la mejor marca de toda la liga igualando a Boston Celtics. El poder de Minnesota en su feudo es incontestable. En casa, 12-1 en el curso.
Lakers la peleó hasta donde pudo. Siempre fue a remolque en el cuarto final, pero cerca en el marcador, eso sí, sin constituir una amenaza real, ya que nunca estuvo a tiro de piedra para darle vuelta al resultado.
Los dos equipos completaban back-to-back respectivos, con los de Chris Finch llevándose el gato al agua a partir de un modo ejemplar de controlar el marcador en la recta final del partido.
Anthony Edwards hizo 27 puntos y Karl-Anthony Towns sumó 21. Y fue Towns la única sombra en la victoria, no porque rindiera mal, sino porque se lesionó en el cuarto final. El jugador tuvo que retirarse del partido faltando 5:07 para su conclusión. La lesión parece localizarse en la parte baja de la pierna y está pendiente de evaluación médica.
Contó además Timberwolves con los 16 puntos y 8 asistencias de Mike Conley, con los 15 puntos, 13 rebotes y 3 tapones de Rudy Gobert y con las 14 unidades anotadas de Jaden McDaniels.
Lakers, cuya suplencia, a excepción de Austin Reaves, no aportó casi nada, sufrió su cuarta derrota consecutiva. Su trayectoria desde que el 9 de diciembre ganara el Torneo de Temporada se cifra en un pobre 1-5.
Anthony Davis sumó 31 puntos, 8 rebotes y 3 tapones, Reaves se fue a 20 tantos y 8 rebotes, Rui Hachimura, que fue titular, logró 18 puntos y D'Angelo Russell terminó con 17 puntos y 8 asistencias, aunque con 7 de 19 en el tiro.
Lakers queda ahora con situación de 15-14 en la tabla de clasificación.