La NBA ha suspendido por tiempo indefinido a Draymond Green a raíz de su expulsión por agredir a Jusuf Nurkic en el partido Suns-Warriors.
La dura decisión de la liga se basa en la reincidencia del jugador de Warriors a la hora de protagonizar acciones violentas.
El endurecimiento de la sanción, según el texto de la liga, se debe a "la reiterada historia de Green de acciones antideportivas".
Green ha sido ya expulsado 3 veces esta temporada y nada menos que en 18 ocasiones en su carrera NBA, siendo el jugador en activo que más expulsiones acumula.
Pero lo peor radica en cómo han sido muchas de las acciones que supusieron dichas sanciones. No hay que olvidar el capítulo violento que protagonizó con Domantas Sabonis en los pasados playoffs, su expulsión por agarrar por el cuello de una forma salvaje a Rudy Gobert hace un mes, un acto que supuso ya atravesar una línea de roja que desembocó en una sanción de 5 partidos, y el golpe en la cara que propinó a Nurkic, y que lleva emparejada la suspensión recién anunciada.
La barra libre se le acabó al jugador de los Warriors, visto el daño que está causando Green a la imagen de su equipo y a la imagen de la NBA.
Tras el Suns-Warriors, Draymond Green aseguró, además, que no había tenido intención de golpear al jugador bosnio, unas declaraciones que poco le han ayudado y que suponen un insulto a la inteligencia.
Draymond Green solo podrá volver a jugar cuando la NBA y los Warriors consideren que cumple las condiciones para regresar al juego.